Capítulo 20

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Por fin acabaron las clases, hoy se me hizo un día muy largo, así que no tardé mucho en recoger mis cosas y salir de clase, en la entrada me esperaba Ariadna, iríamos cada una a nuestras casas pero nos íbamos juntas.

Leila: Hola, ya estoy, vayámonos. -Dije mientras empezamos a caminar-.

Ariadna: ¿Sabes?, creo que Álex está mejorando poco a poco, aún no se acuerda de mí como si fuera su pareja, pero recordó una de las veces que salimos juntos todos en grupo.

Leila: Eso es perfecto, un poco más de paciencia y quién sabe a lo mejor mañana se acuerda de todo.

Ariadna: Bueno a lo mejor mañana no, pero espero que pronto. -Dijo sonriendo-.

Leila: Oye, una pregunta, ¿Tu crees que Brian dejará a Zoe?.

Ariadna: Ya sabes lo que pienso de él.

Leila: Ya, pero contestame a la pregunta.

Ariadna: No, no la dejará.

Leila: Pues él me lo prometió ayer.

Ariadna: ¿Él te prometió eso?.

Leila: Sí.

Ariadna: Pues no me lo creo.

Leila: Pero ¿Por qué eres así?.

Ariadna: Tu ya sabes que no me cae bien, te está dando esperanzas, cuando lo más seguro es que ni siquiera se le pase por la cabeza ser tu novio.

Leila: Pues yo creo que sí, poco a poco voy avanzando.

Ariadna: Bueno está bien, pero si después no deja a Zoe no me vengas diciendo que no te avisé.

Leila: Noo tu tranquila.

Llegamos a la puerta de Ariadna, nos despedimos y yo seguí camino a casa.

Cuando llegué entré en casa y había un montón de bolsas de distintas tiendas, es increíble en solo una mañana Brian se a comprado como para llenar un armario completo.

Vi a Brian bajando las escaleras, con una ropa nueva que se había comprado.

Brian: Hola Leila, bienvenida, ¿Te fue bien en el bachillerato?. -Me dijo con una sonrisa-.

Leila: Pues sí, normal como todos los días. -Dije aún con cara de sorprendida por las bolsas-.

Brian: Como verás ya me e comprado ropa, tu madre fue muy generosa esta mañana antes de irse, y me a dicho que ponga el cuarto de invitados a mi gusto. -Dijo mientras cogía varias bolsas-.

Leila: ¿Quieres que te ayude con algunas bolsas?.

Brian: Vale, y si quieres puedes ayudarme a colocarlo en el ropero, tu madre aún esta haciendo la comida.

Leila: Vale está bien.

Entre los dos cogimos todas las bolsas posibles para no tener que bajar a por las que quedasen, pero aún así debemos de bajar ambos a por las bolsas que quedaban, dimos dos viajes cargados de bolsas, compró demasiado.

Estuvimos colocando ropa solo diez minutos por que nos llamó mi madre diciendo que ya estaba la comida, una vez comimos yo lavé los platos y vasos del almuerzo y subí a seguir ayudando a Brian a ordenar su ropero, pareciera que se iba a quedar para siempre con tanta ropa.

Brian: Y con esto se acabó. -Dijo mientras colocaba la última camisa-. Muchas gracias por ayudarme. -Dijo acercándose a mi-.

Leila: De nada. -Dije sonriendo-.

Él se acercaba más a mi, y nuestros labios estaban muy cerca pero....

Álex: Hola Brian, ¿Te importaría ayudarme a limpiar el coche de mi madre?. -Dijo esto entrando en la habitación sin llamar a la puerta-. Hola Leila, ¿Que haces aquí?.

Leila: Hola Álex, le estaba ayudando a guardar la ropa que había comprado. (¿Por que tuvo que entrar en este momento?).

Álex: Bueno, Brian ¿Vienes?.

Brian: Sí claro, vamos.

Bajamos los tres a la vez las escaleras, solo que ellos dos fueron hacia afuera y yo me dirigí a la cocina ya que era hora de merendar.

~~~Narra Álex~~~

Nos dirigimos a por las cosas para lavar el coche y salimos a la puerta cada uno con un cubo en la mano, lo apoyamos en el suelo y empezamos a limpiar.

Álex: ¿Qué hacías con mi hermana?.

Brian: Pues ella te lo ha dicho estábamos poniendo mi ropa en el ropero.

Álex: Brian venga ya, he perdido un poco la memoria pero no me he quedado tonto.

Brian: Te he dicho la verdad, solo me ayudaba a colocar la ropa.

Álex: No te creo.

Brian: Venga ya Álex, te e dicho la verdad.

Álex: Pues no te creo, y que sepas que como le hagas algo a mi hermana desearás no haber pisado esta casa, no se te ocurra pasarte con ella, te lo digo por tu bien.

Brian: Tu tranquilo no aré nada, te lo prometo.

Álex: No me fio de tus promesas, solo no te acerques a ella.

El resto del tiempo que estuvimos lavando el coche estuvimos en silencio.

~~~Narra Leila~~~

Estaba en el sofá sentada viendo la televisión mientras merendaba un zumo de mango y una tostada de Filadelfia con mermelada de fresa, cuando entró Brian.

Brian: Ya lavé el coche de tu madre, tu hermano se está encargando de recoger las cosas.

De pronto le sonó el teléfono y él se echó la mano al bolsillo y se alejó para hablar, al rato regresó.

Brian: Leila esta noche un amigo mio va a hacer una fiesta en su casa por su cumpleaños y me a dicho que invite a quien quiera, ¿Quieres venir?.

Leila: Vale, ¿A qué hora es?.

Brian: Es a las 23:00h.

Leila: Vale, pues voy a ver que me pongo. -Dije mientras me dirigía a las escaleras para ir a mi habitación-.

Caminar de tu mano es un sueño, es mi sueñoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora