Salí a la calle y allí estaban dos de mis amigas...
-Hola Marta. Hola Nazaret.- Las saludé sin mucho entusiasmo.
-Hola.- dijo Marta.
-¿Te has enterado lo de Don Manuel?.- Preguntó Nazaret.
-Sí, me he enterado.- me costó pronunciar esas palabras, las dije con la voz rasposa y una lágrima fue cayendo por mi mejilla izquierda...después otra por la derecha...y así hasta llorar.
-Lucía... ¿Qué hace la ambulancia en la puerta de tu casa?-Me preguntó Marta.
-¡Eso!-dijo Nazaret con cara de misterio.
-A mi abuelo le ha dado un bajón de azúcar y...se ha cortado las manos...-les contesté con la voz triste y mirando al suelo.
-Ohh.- Contestaron con cara de miedo.
Se despidieron de mí y se fueron...volví a entrar en casa de mis abuelos y el médico preguntó:
-¿Por qué no estáis en el colegio?
-El director a fallecido.- Contestó mi madre ya que yo no le pude contestar y volví a llorar...volví a recordar esos momentos de clases y risas...Volví a encerrarme en mí misma...
