Cuando somos pequeños nos creemos el centro del universo y es en la adolescencia cuando nos damos cuenta de que estamos solos.
Todo esta superado, ya no lloro más por Raúl, ya ni me gusta, ahora me voy a preocupar por ser feliz, por pasármelo perfe con mis amigos, de disfrutar de toda la adolescencia que me queda por vivir. No me gusta nadie y tampoco me voy a preocupar por eso. Pero eso sí que Sergio fue el único que se preocupó por mí cuando se enteró lo de Raúl, es muy buena persona conmigo y muy amable.
He escrito muy poco en este capítulo se le podría llamar {Capitulo 9 express}