Capitulo 19

182 11 0
                                    

Quinto año de la secundaria fue el mejor año, pero todo lo que sube tiene que bajar no? Mis mejores amigas dejaron el colegio. Al pasar a sexto me sentía sola, me hablaba con una chica pero no era lo mismo.
Ya en esa etapa estamos mas grande, no me molestaban como antes, ahora me molestaban pero no lo exponían, solo se reían en secreto.
Me sentía atrapada, no sabia que hacer, como solucionar esto. La psicóloga no me ayudo como yo creía que lo haría. Estaba en la misma situación. La cortada que me hice no me dolía mas, pero si me molestaba cuando rozaba la muñeca contra algo.
Como es de esperarse esta se estaba poniendo sucia así es que la cambien. Busque la otra venda que tenía, obviamente tenia una para cada mano, me la quité e hice limpieza en la herida. Mi madre entra justo a mi habitación y ve que me estaba envolviendo la muñeca. Su miraba recorrió mi mesa de luz y se detuvo en en alcohol.

"Que es eso? Por que tenes el alcohol ahí?  Déjame ver"

Terminé de envolver mi muñeca y la miré negándome, trate de tranquilizarla.

"Nada ma, es que me estaba curando los aros"

Su mirada fue de duda, pero cambio de tema, ella venia a decirme que salia con mi tía. En mi mente paseaba la frase "otra vez sola", sentí un cosquilleo, mi cuerpo sabía lo que eso significaba.
Sola en casa era un desastre, las cortadas se habían transformado en algo normal.
Esta vez probé hacer algo distinto, no se si oyeron hablar de la escarificación. Es como un tatuaje pero sin tinta, luego cicatriza y queda con la forma del dibujo. Todo lo que esta relacionado al dolor me gusta.
Busque mi gillete y  forme un círculo con ella. Luego tenia que levantarme la piel, comencé a meter la gillete por debajo y así empezó a salir con dificultad. Esto no era nada comparado con lo que me hice anteriormente, el dolor era inexplicable, por primera vez quería parar.

Diario de una chica suicidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora