cuanto te amo

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Mientras estábamos en la universidad, iba a ver secretamente a YiXing a sus prácticas de futbol. A él no le gustaba mucho ese deporte, pero a su hermano sí.

Debo confesar que LuHan es un hombre muy guapo y carismático. Lo único que odio de él era que siempre tratara de alejarme de YiXing. Creo que, si nos hubiéramos conocido de mejor manera, seríamos buenos amigos.

Tonto Zhang Han.

[Día cuarenta y tres]

—Profesor Wu. ¡Qué bueno que lo encuentro!

Una mujer anciana se acerca a toda prisa al maestro. Lleva casi media hora siguiéndolo por toda la institución.

El hombre le sonríe en respuesta y ambos detienen su paso al estar cerca.

—Profesora Gong. Estaba por irme. ¿Necesita algo?

—Realmente si. —La anciana toma aire y ríe a la vez. —Cada día estoy más vieja. Ya no sirvo para correr tanto. Oh, profesor Wu, que bien le queda su color natural.

—Gracias, profesora Gong—murmura YiFan con una inclinación. Se ha colocado hace unos días atrás un tinte de color negro en el cabello y también lo ha cortado—. ¿Y puedo saber para que soy bueno?

—Sí —dice la mujer que saca de su enorme bolso un par de papeles—. La siguiente semana entrará un profesor de reemplazo. Yo ya estoy por jubilarme y él no tiene mucha experiencia con jóvenes de nivel superior, por lo que quisiera que lo apoyara.

—¿Su suplente? Que mal que usted ya se vaya, profesora. Los alumnos le quieren mucho.

—Lo sé, profesor Wu. Me gustaría quedarme más, pero ya estoy pasando mi fecha de caducidad. —Ambos adultos empiezan a reír. En realidad la mujer no parece tan mayor. —Para serte honesta, es mejor que ya me jubile. Ustedes los jóvenes tienen que ser enseñados por personas de su edad. Se entienden mejor.

—Pero... Yo creo que los mayores son quien deben enseñarnos, profesora.

—Oh, Wu YiFan, estoy sorprendida de las nuevas generaciones.

—Y yo... —Asiente con una sonrisa de encías. —No se crea. Al paso que voy, me jubilaré antes que el profesor Park.

—¿Al paso que va? Profesor Wu, me enteré sobre su fallecido esposo. Si quiere un consejo de esta vieja abuela, le diré que las cosas suceden por algo, por una razón. No se ahogue en un vaso con agua. Debe vivir su vida.

—Lo haré, profesora.

Haría lo que pudiese con aquel tema del que ahora no gustaba de platicar.

—Entonces, profesor Wu, —la anciana suspira y le muestra los papeles que lleva en las manos—, ¿cree poder ayudarme?

—Ah, casi lo olvido. Por supuesto, profesora Gong. Cuente conmigo.

YiFan toma los papeles y los guarda junto al resto que hay en su maletín. La anciana le sonríe por última vez y se despide sin agregar más. Yifan sigue su camino hacia el exterior de las instalaciones.

Las cosas no han mejorado desde el último cassette que dejó YiXing.

Todo se le hace complicado. Dormir es una de ellas. No piensa en cosas extrañas, es tan sólo que el insomnio le ataca por las madrugadas y contra eso nada puede hacer.

Por otro lado, ha decidido no atormentarse con algunas cosas y ha empezado a regalar la ropa de YiXing a lugares de caridad. Paso que le ha costado mucho, pero como siempre, el bueno de KyungSoo y ChanYeol le han ayudado. También ha comenzado a quitar algunas cosas que no utiliza en casa, y si no hubiera sido por el ojón de su amigo, la cocina estaría hecha un desastre.

Songs for YiFan »KrAyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora