Enamorada de un Insoportable Chico

Una mañana irritante

A la mañana siguiente se despertó más temprano que de costumbre, pues hoy por fin será oficial su entrada al club de básquet. Por lo que se dio un baño para relajarse, mientras tanto pensaba en el día que le esperaba; sentía un presentimiento muy extraño, pero prefirió dejarlo a un lado. 

"Hoy será un gran día" pensó muy feliz al salir de la ducha envuelta en una toalla.

Se dirigió a su recamara para alistarse; por lo que notó su madre ya se había ido al trabajo. Los miércoles eran los días en los que le tocaba llegar temprano a la oficina, pero siempre antes de irse le dejaba el desayuno listo. 

Al estar ya lista fue a la cocina y se sentó a comer muy rápido, ya que ella sentía que debía llegar temprano hoy. Por lo que termino de tomar su jugo de manzana y salió de su casa para agarrar el autobús. 

Yesil llegó al instituto, decidió ir a su salón y ponerse a estudiar para un examen que tenía, puesto que faltaban 20 minutos para que sonara el timbre.

Mientras iba de camino a su salón, estaba un poco distraída en sus pensamientos, no sabía si los chicos del club la aceptarían y eso la ponía muy nerviosa. "¿Y si no me aceptan?", "¿Me harán caso?" eran las preguntas que rondaban por su mente. 

De repente chocó con alguien muy alto y se le cayó la libreta; de inmediato se agachó a recogerlo sin siquiera mirar con quien chocó. El chico solo la observó, ni siquiera dijo una palabra, solo se quedó ahí parado. 

-Ten mas cuidado.

Fue lo primero que dijo el chico cuando ella se levantó, aunque la forma en que lo dijo fue muy descortés y su mirada era muy intensa; tanto que Yesil por un momento se sintió un poco intimidada por él. Lo detalló detenidamente, era muy alto como Patrick, cabello rubio oscuro, ojos color avellana; pero algo muy particular le llamó la atención, era que tenía zarcillos, algo que junto con su mirada de seriedad le daba un aspecto de chico malo. 

-Lo siento, estaba un poco distraída. -respondió ella después de unos segundos de silencio. 

-Pues...

-¡Oh, ya se conocieron! -fueron interrumpidos.

La persona que estaba frente a ellos era el director de la secundaria, el señor Gómez. Un hombre muy amigable y sociable con todos los alumnos, a veces puede ser un poco gracioso con sus comentarios impertinentes. 

-¿De qué habla director? -ella algo confundida le preguntó.

-Resulta señorita Nivans, que la estaba buscando a usted y al joven Jeyden Wood... -dice con una tranquilidad que asusta un poco a Yesil-. Necesito que usted sea la asesora del joven Wood, ya que es un estudiante transferido de Inglaterra. Y quien mejor que usted, la alumna ejemplar de la secundaria, para que este chico se adapte a las costumbres de nuestro país, aunque debo admitir que habla muy bien español. 

Después de procesar la información, pudo reaccionar. -¿Quiere que sea su asesora? -fue lo único que logró decir.

-Sí, es por eso que los estaba buscando. Así que a partir de hoy si tiene alguna duda o necesita ayuda en algo, no dude en buscar a la señorita. -concluyó dirigiéndose al chico, después se fue por el pasillo que conducía a su oficina. 

-Muy bien, yo te buscaré si necesito algo, así que nos vemos luego. Y recuerda ver por donde caminas. -respondió Jeyden dirigiéndose a ella de forma arrogante, sin siquiera mirarla a la cara.

-Esta bien, me voy. -Lo miro con rabia por unos segundos y se fue.

La pobre estaba algo irritada y molesta con ese chico tan maleducado, no lograba entender como era tan irritante; apenas estaba llegando al instituto y ya actuaba como si conociera todo el lugar. Pero lo peor de todo era que tendría que soportarlo, ya que al director se le ocurrió la brillante idea que fuera la asesora del chico. 

-Oye, ¿Qué te pasa? Tienes una cara de pocos amigos. -Dijo Lucero acercándose con el ceño fruncido. 

-Pues tengo pocos amigos -le respondió con ironía la pelirroja al dirigirse a su salón-. Y respondiendo a tu pregunta, seré la asesora del chico nuevo, un completo idiota e insoportable. 

-Vaya, me gustaría saber quien es... ¡Dios que chico mas guapo! 

Rápidamente Yesil se giró y se lleva la sorpresa que también tendrá que soportarlo en clases. Algo que la puso aún mas irritada. 

-Se supone que este día tendría que ser uno de los mejores -masculló para ella misma, se sentó en su puesto y agradeció que estuviera alejado de él. 

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Buenas, buenas... Aquí esta el gran encuentro del insoportable chico y Yesil. Espero les haya gustado, pero tengan por seguro que se pondrá mucho mejor. 

Besos y abrazos :D