Capitulo 16: Te besaría los cuernos

150 5 0
                                    

Sin pensarlo dos veces, camino directo hacia el con Sabrina pisándome los talones, aunque sinceramente no tengo idea de qué le voy a decir cuando esté frente a frente con el.

¿Hola?...
¿Qué haces aquí?...

Tengo la garganta seca y las manos me sudan, ¿qué coño le digo?... ¿Será muy tarde para girarme y subirme al auto de Sabrina para huir?

Justo cuando ya estoy a menos de veinte pasos de el, Sabrina se me adelanta y habla primero, ¡Gracias Dios por no dejarme como idiota!

-¡Hey Alex, ¿tu por aquí?!- le pregunta Sabrina dándole dos besos.

-Si, estoy acompañando al torpe de mi hermano...¿Cómo estas Liza?- me pregunta viéndome de arriba abajo.

Al sentir la intensidad de su mirada, me sonrojo sólo con recordar la última vez que nos vimos... ¡Uffff que calor!

-Ah... Bien ¿y... Y tu?- logro tartamudear, Mmm... No salió tan mal.

-No me quejo- dice cabeceando con una ligera sonrisa.

-Alex, ya volví- dice una voz masculina detrás de el.

Cuando Alex se gira, Sabrina y yo quedamos como dos estúpidas al ver a aquel bombón que se acercaba a nosotras, era notablemente mayor que Alex, un poco parecido a el a diferencia de que el recién llegado tiene una incipiente barba de dos días, cabello más oscuro que Alex pero unos ojos un poco parecidos a los míos, color avellana.

-Ostia hermanito, ¿no me presentas a estas señoritas?- le pregunta éste a Alex.

-Alfred, ellas son Sabrina Alcazar y Caliza Rizt- dice Alex con cara de pocos amigos.

-Chicas, éste capullo fastidioso y presumido es mi hermano mayor Alfred Duffaster.

-Un gusto conocerlas señoritas- dice el tomando la mano que le tendemos Sabrina y yo y guiñándonos un ojo a cada una.

Sin darnos tiempo de responder, detrás de nosotras aparecen Larissa y Michelle, quienes al ver a los dos Adonis que hablaban con nosotras, no pudieron resistir la tentación de venir a joder el momento.

-Muchachas tenemos que irnos y...-Michelle se interrumpe al ver a los chicos y Alfred al ver a las dos chicas no lo piensa dos veces:

-Hola, soy Alfred Duffaster y ustedes son...

-Michelle Carrasquel y Larissa Turpin- contesta Michelle tendiéndole la mano con una amplia sonrisa... ¡DIOS DESAPARECEME!

-Bueno, tenemos que irnos chicos pero fue un gusto encontrarnos aquí hasta luego- les digo a los hermanitos pero antes de que pueda hacer ademán de irme detrás de las chicas, Alex me toma del brazo y dice en dirección a las muchachas:

-Ella irá en un minuto.

Luego de esto y de dejar a mis tres acompañantes con la boca más que abierta, literalmente me arrastra de nuevo al interior de la Sala de Apolo y, tras acorralarme en un rincón alejado de la puerta, se acerca a mi cara y dice:

-He estado todo el jodido tiempo viéndote bailar con otros chicos y no he dejado de verte la boca cuando estabas a tres pasos de mi, me cansé de resistirme.

Dicho esto, mete su lengua en mi boca con tal pasión que casi es doloroso, pero me gusta ese tipo de dolor.

Saquea mi boca sin piedad hasta dejarme sin aliento... Me encanta esa sensación, la que me provoca el, su cercanía, su forma de hablarme... De Besarme.

Cuando ya los dos no damos para más, se separa unos centímetros de mi cara y puedo ver la excitación en sus ojos... Pero también puedo sentirla, un poco por debajo de mi cintura puedo sentir cómo su pene está duro y eso me enciende, me calienta.

Mi Bad BoyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora