Capítulo 14

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Las clases sin Louis no eran lo mismo. Solo había estado con él un día en una clase, pero aun y así lo echaba en menos, y pese a que la gente de la clase me había aceptado bien, por si acaso, para que no me sintiese tan sola, Louis me puso un acompañante, que la verdad, lo había visto en clase. Él era un chico alto, moreno, con ojos color miel, y una manchita en el cuello la cual le queda bien. La verdad no es el tipo de chico que pensarías que iría con gente como Louis, pero no es así, es como él y sus amigos, pero diferente, sin toda esa oscuridad a su alrededor, sin esa mentalidad depresiva contante,... él era diferente, y por alguna extraña razón eso me hacía sentir bien, alejarme un poco aunque solo fuese por un rato de ese chico que vive en un mundo triste, frio, solitario, oscuro, y con una mentalidad algo depresiva. Me sentía mal al pensar eso, pero era así, me sentía bien, pero el problema era que con él me sentía mejor.

Al terminar las clases me dirigí hacia la salida con mi nuevo acompañante, pero de repente una chica me paró, y Liam, mi acompañante, siguió caminando como si nada.

-disculpa, ¿eres ___?- preguntó una chica pálida, con el pelo de 2 colores, un color azulado-verdoso oscuro y se sobreponía a él un color verde clarito pero se sobreponía con mucha gracia-

-sí, soy yo, ¿te puedo ayudar en alguna cosa?

-veras, es que la hermana de Louis me ha dicho que estas saliendo con él, y era por saber si sabias algo de el

-veras, está en urgencias, en el hospital, ingresado-dije sin tampoco dar mucha información-

-¿qué ha pasado para que este ahí?

-se peleó con su padre y la cosa no terminó demasiado bien-respondí-

-vale, gracias- dijo la chica y se fue en dirección contraria a la salida-

Al girarme me encontré con Liam apoyado contra las taquillas del pasillo, esperándome.

-me podrías haber avisado, estaba hablando solo hasta que me he dado cuenta de que no estabas-dijo Liam con voz de indignación-

Los dos seguimos andando hasta la salida, y al poco rato de andar, Liam estaba en la puerta de su casa, pero aun y así, no se quedó, decidió acompañarme a ver a Louis al hospital, así que en mitad del camino al hospital, decidí romper el silencio incomodo que había.

-Liam, ¿Cómo es que siendo como ellos, no seas como ellos?-dije intentando juntar medianamente bien mis palabras en la cabeza, pero a la vez intentando no incomodarlo ni ofender-

-nunca me ha gustado ese estilo, pero sí que tengo muchos rasgos como los que tienen ellos, pero a la vez me faltan muchos otros rasgos, y también gran parte de la ayuda ha sido gracias a Louis, lo conozco desde que éramos pequeños, así que también en cierta forma cuando él se metió en este mundo, me introdujo a mi también

-¿Louis era tan complicado como ahora?, ósea, me preocupa que lo nuestro no funcione siendo él como es

-sí que era algo complicado, y con el tiempo se ha ido complicando cada vez un poco más, es más, la situación que tiene más o menos ya la conoces, pero creo que todo ha influido un poco para que termine siendo así, pero no te preocupes, yo creo que le harás bien, así que lo más seguro es que funcione... o como mínimo eso creo yo

-gracias, de verdad Liam, estas tranquilo todo el tiempo, y eso me genera confianza, y... pese a que hace poco que te conozco, la verdad es que me parece como si te conociese de toda la vida

Al poco rato llegamos ya no mi acompañante, si no mi nuevo amigo y yo a la habitación del hospital en la que se encontraba Louis. Entramos en la habitación, y no había nadie, cosa que nos extrañó a los 2, pero cuando escuchamos el agua correr por las tuberías en señal de que alguien acababa de usar el baño, y después el agua correr por un grifo como si alguien se limpiase las manos, nos quedamos algo más tranquilos, pero perfectamente podría haber sido cualquier persona.

Cuando la puerta del baño se abrió, pudimos divisar a mi enfermo ingresado en un hospital favorito, el cual no terminó de darse cuenta de nuestra presencia, y pese a los moratones y poco más que unos cuantos rasguños y algunos restos de sangre, se notaba que se había terminado de despertar, más que nada se notaba porque seguía medio adormilado.

-¿no nos vas a decir nada?- dijo Liam algo indignado-

-hola Liam, encantado de verte, y veo que has traído a mi novia, gracias por tu breve visita, que pena que te tengas que ir tan pronto, adiós Liam-dijo Louis acompañando a Liam a la puerta mientras este se quejaba de la gran amabilidad, agradecimiento y consideración que tenía su amigo con el-

Cuando terminó de echar a Liam de la habitación, me vio y se me acercó.

-hola nena, tenemos que hablar

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