*NARRA ALI*
Estábamos Pablo y yo en mi casa. Mis padres nos han dejado la casa mientras terminan su reunión de trabajo. Siempre están viajando. Lo bueno es que ayer me lo pase en grande en la fiesta que me organizaron mis amigas. Y he estado toda la noche con Pablo. Me encontraba mal pero podía aguantar. Recuerdo todo lo que pasó ayer, aún con la resaca que tengo hoy. Me acuerdo sobre todo de la conversación que tuve con Harry. Esa conversación en la que dije la verdad de lo que pensaba. Pero yo no quería decirlo, fue el alcohol que se me subió a la cabeza.
¡Ding dong!
Sonó el timbre de casa. Yo estaba en pijama así que bajó Pablo a abrir la puerta.
-Hola, ¿Mich no?-
-Si, hola Pablo.-Dos besos. Bajé sabiendo que era mi mejor amiga que me había visto con peores pintas.
-Hola guapisima.-La di un fuerte abrazo.
-¿Que haces en pijama? Venía a recogeros para que vengais al Starbucks.-
-Bf, me acabo de despertar tía, vaya resaca.-
-Tienes mala cara, sería bueno que tomaras el aire.-Dijo mi novio.
-No hay más que hablar, duchate, te vistes y os venís.-Impuso Mich con una sonrisa.
-Vale.- Contesté sonriente.
Me dolía la cabeza, y sólo con tener que ver a Harry después de la conversación de ayer me duele hasta la barriga.
-Ya estoy amor, ¿Vamos?-
-Si, vamos.-Pablo me cogió del hombro y nos dirigimos al Starbucks.
Cuando llegamos estuvimos hablando de mis años en Inglaterra y de como conocí a Pablo. Luego salimos a la calle a dar una vuelta por el paseo marítimo. Todo iba bien hasta que Harry se puso a mi lado con la intención de decir algo.
-¿Por qué ni me miras?-
-Me da vergüenza.-
-¿Qué?-
-Estuve pensando todo el día en como pudiste tomarte la conversación de anoche.-
-Estabas borracha...¿Te acuerdas?-
-Si, me acuerdo de que estaba borracha y de lo que me dijiste.-Contesté con intención de decirle que sabía que me quería.
-Ah por mi perfecto. Pero, ¿y de lo que me dijiste tu?-Guarde silencio ante su pregunta.
-¿Quieres la verdad?-
-Si.-Dijo no muy convencido.
-Toda y cada una de las palabras que dije son verdad. Los borrachos siempre dicen la dicen.-
Harry me miró serio. Asombrado mejor dicho. No se creía que nunca le olvidé. No se creía que aún tenía un 99% de posibilidades de que yo vuelva a ser suya.
