Ali llegaba más tranquila al colegio, la música fue buena idea. Cuando entró, fue a su taquilla para ver su siguiente asignatura. Literatura. Aburrimiento asegurado. No es que fuera una de las peores, pero no es que fuera divertida que digamos. Cuando iba en dirección a su clase pasó lo peor que podía pasar, Harry. Ahí estaba, frente a ella. Cambió de sentido, lo único que quería era estar en la otra punta del colegio. Él la hacía daño pero eso, iba a cambiar. Ella le haría daño a él.
-¡Ali,Ali!-Gritaba Harry desesperado.
-Déjame-Alicia no le miraba ni a la cara.
-Lo siento por lo de ayer pero, pero yo tampoco quiero nada contigo.-
Esas palabras la inmovilizaron. Por unos segundos no se movió, pero decidió darse la vuelta. Le miró. Otra de esas miradas enamoradizas. Para él y para ella.
-¿Que dices?Entonces lo de ayer...-Preguntó insegura.
-Lo de ayer fue un calentón por parte de los dos, y fin de la historia.-
-Me parece sensato y bien así no tendré que volver a verte y ¿Fin de la historia?Si.-Mintió Ali como nunca antes había hecho.
-¿Todo como antes? Aún que bueno, si quieres algo más me llamas ok?-
-Si, todo como antes. Todo mal. Lo de ayer no significa que no te siga odiando-
Se dio la vuelta y marcho. Nunca había dicho tantas mentiras juntas. Harry mientras pensaba: ¿Un calentón? La mayor estupidez del mundo. Alicia le gustaba pero esta claro que si quería algo más se lo hubiera dicho. No era tímida eso estaba claro. Pero bueno una chica que había visto pasar antes no estaba nada mal y...ya le había mirado.Ali fue directa a clase. Se sentó al lado de Mich.
-¿Te despejaste por el camino?-Dijo su amiga.
-Todo está mal, todo está mal...-Repetía Ali una y otra vez.
Se lo contó todo a su amiga. El profesor, el padre Don Vicente, que no era muy despierto el pobre, no las decía nada. Toda la clase estuvieron hablando de Harry...y más Harry. Era su único tema de conversación. Él ocupaba toda la mente de Alicia.
