Dudas.

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Me das una de cal y otra de arena. Un día estoy totalmente segura de que te gusto, al día siguiente no puedo parar de dudarlo, de sentirme absurda, de creer que estás jugando conmigo, de pensar en qué es eso que te retiene de tal forma para que no te acerques a mí.

Que no tengo quince años. Que me gustas muchísimo. Pero no voy a esperar algo que puede que nunca suceda. Y por eso, me he lanzado a los brazos de otro, esperando que fuese algo bueno de verdad. Y puede que lo sea. O puede que no. Pero al menos lo estamos intentando. Porque tú no das ni un paso, y yo ya he dado dos o tres en tu dirección.

Te di la oportunidad, nos quedamos solos, esperé en serio que me dijeras algo, me pidieras mi número, una cita, algo. No dijiste nada. Esa misma noche decidí que tenía que tomarme esto con más calma, que tenía que seguir con mi vida, que no podía darte mi corazón antes de que lo merecieras o acabaría pasándolo fatal.

Que deseé con todas mis fuerzas que me dijeras algo, pero no lo hiciste. Y yo tampoco, porque te había lanzado como mil indirectas y no quería hacer más el tonto. Así que en mi cabeza pensé: "o ahora, o me pierdes". Y tú decidiste sin saberlo.

Podrás estar pensando que tengo mucha facilidad para estar con alguien. Pero no es así, no te equivoques conmigo. Simplemente conocí a alguien que estaba ahí para mí. Que me hablaba todos los días, se preocupaba, y quería quedar conmigo. Y quedé con él el mismo día que sentí que había perdido todas las oportunidades contigo. Y sí, la cosa fue genial. Y sí, al final acabamos besándonos. Y te admito que no pensé en ti en ningún momento estando con él.

Los días sucesivos entré en ese estado de ánimo creado por la ilusión de un nuevo romance. Nada serio, no aún. Definimos las cosas como un nos estamos conociendo, que es lo justo. Lo veía todo muy claro. Ya no te veía tan claro a ti. Aunque te seguía buscando cada día, deseando verte. Porque sí, porque era algo inevitable para mí. Pero había llegado a pensar que podría tener una relación con alguien sin desearte a ti.

Y de repente, todo empieza a torcerse de nuevo. Porque después de una semana sin verte, entras al cuarto donde estoy yo y de repente mi corazón se acelera como no lo hace con nadie más. Intento controlarlo, de verdad que lo intento. Pero no puedo hacer nada. Cada trocito de mi cuerpo parece que te pertenece, sin saber por qué. Y te veo buscarme con la mirada, mirarme con ese descaro que encuentro encantador, pero solo porque lo haces tú.

Y otra vez me descubro pensando en ti a diario, porque todo el sentimiento ha estado siempre ahí, pero he estado intentando ocultarlo. Porque es tan bonito, tan fuerte, que da miedo. Y porque creo que mientras mi corazón se acelere al verte no podré estar con nadie en serio. Porque en el momento en el que quisieras....estaría ahí.

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⏰ Última actualización: Sep 05, 2015 ⏰

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