Capítulo 7. Una Felicidad extraña

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Alex termino de ducharse, se vistió de una manera muy sexy... unas botas con tacón negras, un pantalón ajustado color negro, una blusa azul marino de botones semi abierta del pecho, sus lentes negros que la hacían ver interesantemente sexy y su cabello lacio negro un poco mojado la hacía ver casi irresistible. Iba saliendo de su habitación cuando escucho el teléfono de su casa sonar asi que apresuro su paso.

¿Hola?- dijo Alex a la persona al teléfono

Hermana ¿pero que tanto hacen? Las estamos esperando para desayunar, creí haberte mandado un mensaje- dijo Elizabeth un poco molesta-

¿Qué? Perdón hermana no revise mi teléfono desde que llegamos anoche- Alex recordó lo que había pasado y se sonrojo un poco- nosotras ya desayunamos, nos duchamos y ya estamos listas para salir

Ah mira pero que desconsideradas son, acá morimos de hambre ¡por esperarlas!

Perdón Ely, te lo compensaremos- dijo Alex tratando de aliviar el conflicto mientras Esmeralda la miraba con preocupación ya que aunque no sabía que estaba diciendo Elizabeth pudo adivinar que pasaba-

Vale, Vale no te preocupes pequeña, mientras vayan a dar una vuelta al parque que esta por tu casa, ahí pasaremos por ustedes para ir de paseo, debemos aprovechar estos días de descanso, te encargo a mi pequeña Esmeralda.

Si está bien no te preocupes, nos vemos en un rato, bye bye- termino la llamada y colgó- Por un momento estuvimos en problemas jaja- dijo riéndose de lado- pero no te preocupes es como hablarle a mi hermana- trato de calmar a Esmeralda-.

Ay menos mal, me asuste por un momento-suspiro- ¿a dónde quiere que vayamos?- pregunto

A un parque de aquí cerca, ahí pasarán por nosotras, al parecer hoy no tendré que manejar.

Ah vaya está bien, ¿vamos?

Si, vamos... sirve que nos distraemos un poco antes de que todos lleguen- le dijo mientras caminaba a la puerta seguida de la joven rubia, ambas salieron de la casa y se encaminaron al parque, Esmeralda quedo fascinada por el hermoso paisaje sin darse cuenta tomo el brazo de Alex, al sentir el agarre de Esmeralda Alex quedo totalmente sonrojada y sorprendida, no podía creer lo que estaba pasando pero no se quitó, Esmeralda se sonrojo y se apartó de inmediato

P-Perdona, fue un impulso...- dijo totalmente sonrojada, parecía un pequeño jitomate-

No te preocupes, fue lindo- le dijo Alex mientras ahora ella le tomaba del brazo, cosa que la hizo sonrojar junto con Esmeralda, pero ambas cedieron.

Ambas chicas caminaron y llegaron al parque, se sentaron en el verde y hermoso césped, comenzaron a charlar cuando de pronto Alex recordó que hace unos días ella había estado ahí y había visto a dos chicas "juntas", Alex se sonrojo y en un dejo de nervios iba a apoyase en su mano sobre el césped pero de los nervios puso su mano sobre la de Esmeralda, las chicas se sorprendieron y dirigieron su mirada a sus manos, enseguida se miraron a los ojos y las dos estaban tenuemente sonrojadas pero sentían una felicidad extraña que nunca antes habían sentido, en ese momento se dejaron llevar y se besaron de una manera muy tierna y claro llena de nervios... cuando a lo lejos escucharon unos gritos

¡Esmeralda! ¡Alex! ¿Dónde están?

Ambas chicas se separaron asustadas y se pusieron de pie, miraron alrededor rápidamente para ver si alguien las había visto, pero para su suerte nadie las había visto

¡Aquí estamos!- dijo Alex en voz alta

Vaya, hasta que las encuentro, hermana como te gusta hacerme las cosas difíciles-le dijo Elizabeth a Alex mientras le apretaba la mejilla y Alex ponía una cara adorable pero un poco molesta ya que su hermana siempre la trataba como niña a pesar de que ya era una adulta- Vámonos ya- dijo al momento que se liberaba del agarre de su hermana y se masajeaba la mejilla-

Esmeralda y Alex se miraban a distancia, se notaban muy nerviosas, pues casi las descubre Elizabeth, pero al mismo tiempo se sentían como colegialas primerizas. Las chicas subieron a la parte de atrás del auto de Elizabeth, se sentían ansiosas por estar tan cerca otra vez y tener que actuar como si nada pasará, Elizabeth iba en la parte del copiloto, mientras su esposo conducía, el camino fue agradable y al mismo tiempo interminable, tuvieron una plática con Elizabeth, contándole como habían pasado la noche, claro omitiendo esos pequeños encuentros que tuvieron las dos chicas, Elizabeth noto algo en ellas, pero no dijo nada pues pensó era solo su imaginación, así que se dispusieron a no hacer más grande el asunto, después de unos minutos llegaron a su destino ...



Nota: lamento lo corto del capitulo pero tuve un percance y no me he sentido bien para escribir libremente, problemas~ pero el próximo estará mas largo y lleno de emoción, gracias por seguirme y recuerden que "Amar es compartir"

Descubriendo un Amor ProhibidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora