Capítulo 8. Un lugar secreto

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Pasaron la tarde divirtiéndose de una manera que hacía mucho Alex y Elizabeth no lo hacían, habían pasado ya 5 años desde que su hermana se había ido del país y la veía solo en fiestas de vez en cuando, por ese momento Alex y Esmeralda se olvidaron de sus pequeños encuentros y de la ansiedad que se encontraba dentro de ellas.

Al llegar la hora de la comida Elizabeth propuso ir a un restaurant, pero Alex interrumpió:

Oye, pero ¿no crees que sería mejor ir "ahí"?- dijo Alex un poco misteriosa

Vaya pero que sorpresa que lo menciones, hermana, pero si me parece buena idea, vamos- respondió Elizabeth

Esmeralda no sabía de qué lugar hablaban solo siguió a las dos chicas, mientras el esposo de Elizabeth se sonreía de una manera muy tierna al ver las expresiones de su joven esposa, subieron a su automóvil y comenzaron su pequeño traslado, no habían pasado ni 25min cuando ya habían llegado, al salir del coche Esmeralda se quedo con los ojos bien abiertos con un brillo muy particular y hermoso, la joven rubia estaba realmente sorprendida ante tan hermoso paisaje, no podía calcular con exactitud, pero era un terreno enorme lleno de árboles, arbustos, flores, un pequeño rio que recorría todo el lugar, podía ver como el cielo azul hacia un perfecto contraste con las copas de los árboles y las aves, así como mariposas y demás animalitos implantaban en ella un hermoso recuerdo que sabía iba a atesorar por el resto de su vida, sacándola de su sorpresa escucho la voz de Alex

Veo que te gusto mi lugar secreto- le dijo sonriendo dulcemente-

S-Si... es hermoso, no tenía idea que un lugar así se encontraba tan cerca de nosotros- le respondió algo sonrojada ante la palabra "mi lugar secreto"

Aquí solíamos venir de niñas con nuestros padres, pero a Alex siempre le encantaba venir sola a escondidas- interrumpió Elizabeth, mientras se escuchaban unas pequeñas risas por parte del esposo de Elizabeth –

Pues aquí me siento muy tranquila y feliz, nadie me molesta-miro juguetona a su hermana- pero bueno ya dejemos de hablar de mi bonito pasado y vayamos a comer-dijo riendo de lado mientras tomaba del brazo a las dos chicas y le hacia una seña a su cuñado-

A lo lejos se veía un establecimiento no muy grande pero muy hermoso, en cuanto llegaron el esposo de Elizabeth comenzó a despedirse

Bueno señoritas, yo cumplo con mi parte y las dejo descansar solas, para que estén más en confianza- les dijo a las tres chicas acompañado con una blanca y bella sonrisa-

Está bien amor, te hablo cuando tengas que venir por nosotras, ¿está bien?- dijo Elizabeth mientras le daba un beso muy tierno-

Claro que si querida, espero tu llamada, que se diviertan-dijo dirigiéndose a las dos chicas que se miraban extrañadas. Se despidieron y vieron como el joven se retiraba, una vez solas se adentraron en el establecimiento, de inmediato pudieron llenarse de una atmosfera de familia y relajación.

Buenas tardes señoritas Harrison sean bienvenidas-dijo el mayordomo- pero miren que tenemos por aquí, esta carita no la había visto- dijo una señora de edad un poco avanzada que se encontraba sentada en la recepción-

Ah, hola Marie, ella es nuestra amiga Esmeralda Wood, mi hermana tuvo la idea de traerla aquí-dijo Elizabeth mientras Marie se acercaba-

¡¿Enserio?!- dijo sorprendida Marie- vaya eso si es algo que no se ve por aquí

No exageres Marie, solo se me ocurrió- dijo sonrojada Alex, mientras pensaba: "Tienen razón siempre fui muy envidiosa con este lugar, espero no se vea tan raro"; giro un poco la mirada- pero bueno ya basta de charla, vamos a ducharnos para comer algo- corto el ambiente vergonzoso-

Tienes razón, estoy hambrienta pero muy acalorada, vamos- dijo Elizabeth

Déjeme acompañarlas para mostrarles las habitaciones-dijo el mayordomo del lugar-

Claro- dijo Alex mientras seguían al hombre-

Mientras caminaban Esmeralda no dejaba de ver la instalación, tenía un toque bastante agradable, un poco lujoso pero hogareño, era una mezcla perfecta para ese mini paraíso, Alex no dejaba de ver de reojo a la joven rubia mientras pensaba que había valido la pena cada momento vergonzoso que tuvo que pasar, con tal de ver las expresiones de Esmeralda, aunque aún no podía explicarse cómo o porque estaba deseosa de mostrarle muchas cosas a la joven, ella no sabía que estaba pasando pero de alguna manera no le molestaba. Después de unos cuantos minutos...

Hemos llegado, estas son las habitaciones- dijo el mayordomo mientras abría dos grandes puertas de manera bien cuidada- Estas son tres habitaciones conectadas por esta pequeña fuente, las cuales podrán tener acceso siempre que quieran-se dirigió a ellas con un tono bastante amable-

Perfecto, me encanta, mi padre sí que ha remodelado este lugar a como le comente, me alegra-dijo Elizabeth quitándose la pequeña chaqueta que llevaba puesta- Bueno muchas gracias Albert, sin duda ya extrañaba estar aquí-dijo mientras se estiraba-

A sus servicios señorita Elizabeth- dijo mientras les daba un saludo y caminaba hacia atrás- las dejo solas, cualquier cosa hay un teléfono en cada habitación, marcando 02 llaman a recepción y ahí las atenderemos en brevedad, que disfruten su estancia y una vez más bienvenidas-

Muchas gracias Albert- dijeron las tres chicas al mismo tiempo y le despidieron-

Bueno nos vemos en 30min ¿les parece?-dijo Elizabeth

Me parece bien-dijo Alex

Si, a mí también-Dijo esmeralda sonrojada, ya que se sentía muy fuera de su mundo real, sabía que Elizabeth tenía una familia un poco excéntrica pero no a ese grado-

Entonces no se diga más, nos vemos en 30min y disfruten su ducha- les dijo a las chicas mientras se dirigía a su habitación, a los pocos segundos se quedaron solas-

B-Bueno Esmeralda nos vemos en trein...-dijo cuando de pronto la joven rubia la interrumpió con un abrazo -

Muchas Gracias Al, Muchas gracias por traerme a tu lugar secreto-dijo con mucha emoción y con mucho sonrojo

Alex se quedó muy sorprendida ya que la había abrazado con tanto sentimiento, pero también porque no le dijo "Alejandra" o "Alex" como todos le decían, si no que le dijo "Al", pero bueno ella estaba feliz de la reacción de esmeralda así que solo correspondió al abrazo, se quedaron ahí unos segundos hasta que no pudieron más, se separaron mientras de inmediato Alex tomaba a Esmeralda de la mano y la llevaba con ella hasta la habitación ya que había escuchado que alguien andaba por ahí, seguro era el mayordomo dando sus recorridos de rutina, pero no quería que las interrumpiera.

Las dos chicas entraron rápidamente a la habitación y apenas habían cerrado la puerta cuando Alex aprisiono a Esmeralda en un profundo y largo beso lleno de ansiedad, las dos chicas comenzaron a besarse tan sensualmente debido a lo mucho que habían aguantado con anterioridad, comenzaron a tocarse una a la otra por encima de la ropa cuando de pronto un sonido las hizo respingar de un susto... 





[Justo como prometi, un capitulo mas largo, gracias por leer y esperen mas encuentros entre nuestros dos chicas. Recuerden que amar es compartir... READ AND SHARE]


Descubriendo un Amor ProhibidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora