Capítulo 4. Nuevo día, Nueva oportunidad

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La noche transcurrió rápidamente cuando Alex se dio cuenta ya era de día, la luz podía colarse por sus grandes cortinas blancas, bajo la sabana giro lentamente su cabeza a la derecha abriendo un solo ojo para ver su reloj, ya eran las 8am justo a tiempo para poder ir por el periódico que estaba en su buzón recién entregado, cuando iba saliendo de su recamara paso por enfrente de la habitación donde se quedaba Esmeralda, se pego un poco a la puerta para intentar escuchar si Esmeralda había despertado, pero por obviedad no pudo escuchar absolutamente nada, así que siguió su camino hasta su destino, cuando ya venía de regreso se topo con Esmeralda en la sala.

-Buenos días Alex -dijo Esmeralda mientras miraba a la morena entrar por la puerta principal con un periódico enrollado en la mano derecha-

-Hola Esmeralda buenos días, ¿cómo dormiste?

-Muy bien, hacia días que no dormía así de delicioso, claro desde que comenzamos a planear el viaje y unas cosas en la oficina me dejaron sin tiempo para dormir plácidamente-bostezo cubriendo su boca con el envés de la mano-

-Pareciera que sigues con sueño-dijo divertida-

-Oh no, es solo leve resaca, tomare un poco de agua mineral para hidratarme, ¿tienes?

-Claro en la cocina me parece, iré a buscarla, mientras puedes tomar asiento, con confianza-le regalo una sonrisa mientras se alejaba del lugar-

Mientras Alex buscaba el agua mineral en la cocina, Esmeralda repaso lentamente la sala y pudo admirar unas fotos que se encontraban en una mesa justo del centro, pudo observar a Alex junto a un chico bastante atractivo que la abrazaba cariñosamente, cabello castaño, ojos verde claro, alto, piel blanca y una dentadura totalmente blanca, tomo en sus manos el portarretrato cuando de pronto el sonido de unos pasos y una voz la sorprendieron haciendo que diera un pequeño salto

-Vaya parece que soy una amenaza para ti, segunda vez que te asusto-le dijo soltando una pequeña risa la cual desapareció en un momento ya que no quería incomodar a la chica

-No es eso tranquila, lo que pasa es que me quede contemplando esta foto, te ves muy bien con tu novio, hacen bonita pareja

Alex sonrió divertida al escuchar el comentario de la chica –No es mi novio, es un gran amigo que conocí en un viaje de intercambio a Kyoto, por el momento soy felizmente soltera-se acerco a ella y le dio el agua mineral que había ido a buscar, en un pequeño giro camino hacia el sofá dejándose caer de lleno en el-

-Oh ya veo, perdón por el comentario-tomo un sorbo del agua al mismo tiempo en que se sentaba en el sofá que estaba justo enfrente de Alex-¿Ya desayunaste?-le dijo intentando cambiar el tema, al mismo tiempo en que bebía un poco del liquido burbujeante que había en su vaso.

-No aun no, esperaba encontrarte despierta para que desayunáramos juntas, te apetece que cocine algo, quieres ir a un restaurant o vamos a casa de mis padres a donde esta mi hermana, tú eliges

Se quedo pensando un momento mientras terminaba su bebida- Me gustaría desayunar tranquila y sin prisas, podemos desayunar aquí si tu gustas- dijo mientras miraba en el fondo de su vaso el poco liquido que aun quedaba

-Perfecto, entonces toma asiento y prende la televisión si gustas, o también puedes leer el periódico, mientras yo iré a la cocina a preparar algo para desayunar, ¿algo en especial que se te antoje?-le pregunto mientras se encontraba parada en la puerta de la cocina al mismo tiempo que se ponía un delantal blanco para no ensuciarse las ropas

-Lo que gustes está bien para mi, muchas gracias-le dijo un poco apenada y de inmediato reacciono- Pero no puedo quedarme aquí sin hacer nada, por favor déjame ayudarte-se entusiasmo-

Descubriendo un Amor ProhibidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora