Rayo y luna

Capitulo 8

Cada vez amaba mas este viaje *nótese el sarcasmo* por un error del jefe mi padre que había sido el encargado de comparar los boletos de avión de todos los empleados a los que iba a trasladar y claro que con los empleados también iba su familia, pero el muy inteligente en vez de comprar mi boleto junto a él de mi hermanos o a mis padres lo compró a una fila de distancia, todos estaban juntos menos yo.

Ahora pasaría las próximas 12horas junto a un extraño, lo único que me calmaba era que mi asiento estaba junto a la ventana como me gusta. Me levante de mi asiento y decidí ir otra vez con mama y papa a hacer un berrinche a ver sí se apiadaban de su pequeña hija y me cambian de asiento a cambiaban a Jared.

-No quiero estar sola- le dije a mama haciendo un puchero cuando llegue a los tres asientos donde estaban ella, papa y Rachel.

-No es tan malo nena- me consoló papa que aun estaba intentando bajar las del portabebés donde estaba sentada Rachel que al parecer se habían atascado y desde que subimos papa intenta bajar, pero todos sus intentos han sido en vano.

-No podemos cambiar de puestos muñeca- me dijo mama haciendo una mueca de pena- si pudiéramos ya te hubiéramos cambiado.

-Sí, pero te quedaras sola y lejos- se burlo Jared y soltó una carcajada desde su asiento que estaba adelante y junto a la ventana y para su suerte no estaría rodeado de extraño ya que estaría con Mark y Jeanne, aunque pensándolo bien no creo que pasar 12 horas junto a Jeanne sea buena suerte.

-Si como tú tienes el mejor asiento- le sonríe malvadamente mirando a Jeanne y el resoplo al darse cuenta de lo que me refería y volvió su atención a su teléfono.

-Ve a sentarte cariño, te veremos en 12 horas- dijo mama y me guiño un ojo y luego de lanzo un beso

-Hasta luego nena, deséame suerte- me pidió papa y me dio un beso en la frente
- adiós- le lance un beso a mama y le di un beso en la mejilla a papa y otro a Rachel el me dio un beso muy baboso en la nariz- suerte-le dije a papa y después de otro intento por fin papa pudo bajar la baranda y levanto los puños triunfante

-Lo hice- grito y todos mis hermanos, mama y yo le aplaudimos y luego de unos segundos todos los pasajeros y las azafatas también le aplaudieron, el hizo algunas reverencias y tomo asiento y yo fui a el mío, decidí encender mi laptop para ver mi película favorita que es Intensamente! Esa película me hace reír a más no poder y llorar a mares.

-Quiere algo señorita?- una azafata morena, muy guapa y muy sonriente estaba en el pasillo con un carrito.

-No, gracias- dije y le sonreí, ella se acerco a mi asiento y cuando estuvo cerca me susurro.

-Aquí entre las dos, tu vecino- señaló asientos vacios a mi lado, sonrió pícaramente y levanto sus cejas- es solo uno, mejor dicho es un chico y el compro los dos asiento- termino de decir y siguió su camino.

Ese es un buen dato, ahora pasare 12 horas junto a un chico pero tal vez sería guapo y súper simpático y de este vuelo sacaría un nuevo amigo, conecte los auriculares y le di Play a la película, luego de unos minutos de ver la ocurrencias de las emociones de Riley, una mano toco mi hombro y me volteo a ver quién me interrumpió, era un chico que estaba sentado en el asiento después de el asiento vacío a mi lado, era extremadamente sexy, tuve que tragar saliva un par de veces, era alto aunque estaba sentado pero aun así se podía notar que era alto y su cara tenia rasgos fuertes y totalmente masculina pero también muy joven, quizás era un par de años mayor de que yo, al parecer la azafata estaba muy bien informada.

Tenía una franela negra con cuello V que se ajustaban muy bien a su dorso y a sus brazos, dejando ver su muy definido abdomen, bíceps y algunos tatuajes y unos ojos chocolates demasiado hermosos que tenían un brillo diferente a todos los que he visto, pero tenía un aire y porte arrogante que se notaba a kilómetros de distancia, tenía la barbilla ligeramente alzada cosa que rectificaba mi sospecha (que ya era un hecho) el chico sexy es creído y me pareció raro no percibir ninguna emoción en el, era como un iceberg totalmente frio y duro.