1; Vuelta a casa.

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Mía y Pedro, luego de una mañana en el colegio, llegan a casa de ella caminando.
Entran dirigiéndose a la sala, para dejar sus pertenencias. Una vez que dejan todo se dirigen a la cocina por algo para almorzar.
Entran y se encuentran con Javier;El padre de Mía.

Narra Pedro:

Oh mi dios.. Javier está todo transpirado, y con sólo un par de shorts negros.. Que bien se vé.
Mía me hace una seña para que continúe caminando, saluda a su padre y este me mira sonriendo.
-¡Pedro! Que bueno verte otra vez- Dice observándome.
Me pongo nervioso al sentir su mirada sobre mi.
-Hola Javier- Digo sonriente y beso su mejilla.
Mientras Mía prepara el almuerzo con ayuda de su padre, él nos cuenta que entrenó toda la mañana.. por eso estaba así.

Luego de que los tres almorzáramos juntos. Javier decide ir a tomarse una ducha, y con Mía junto a nuestras cosas vamos arriba a su habitación.
Nos sentamos sobre su cama y miramos televisión escuchando música que proviene de su computadora. Observo su cuarto detenidamente; tantas fotos,  de tantos momentos diferentes de su vida. Me acerco a ellas y observo más de cerca. Me encuentro en muchas de ellas, tantos recuerdos hay allí.
Sonrío, y miro entre las fotos una en la cuál aparece con su padre.
Wow.. que hermoso se veía de joven. (Cómo si ahora no se viera bien) (¡Pedro! Deja de pensar en esas cosas)
Río a mis adentros y vuelvo mi vista a Mía.
-Hey...- me acerco y me recuesto a su lado. -¿Estas cansada?

Ella me mira sonriendo y toca mi cabello -Sólo un poco... tal vez- río leve mirándola y acaricio su mejilla.

-¿Quieres que vaya abajo a ver televisión? Así descansas un rato..-Digo y me pongo a pensar en Javier.. se debe estar bañando...

-¡No!- Dice -Quédate aquí conmigo- Juega con mi pelo y la miro sonriendo. Es tan parecida a Javier; el no tiene comparación.

-Está bien niña- Río haciéndole un tipo de burla y ella me acompaña con la risa.

-Okey niño...- Me mira y besa mi mejilla- Te quiero...- Dice sonriente.

-Yo también te quiero mucho, niña- sonrío y me levanto -Ya vengo- Ella asiente y camino para salir de la habitación.

Camino pensando en cosas sin mucha importancia, y me dirijo al baño directamente. Supongo que Javier ya salió.
Me acerco a abrir la puerta y sale Javier aún algo mojado, con una toalla en la cintura.
Empiezo a delirar con muchas cosas en mi cabeza, hasta que el me saca de mis pensamientos.

-¿Ibas al baño?- Dice sonriente. Esa sonrisa que tiene.

-Si.. iba a entrar porque pensé que no ibas a estar- Trato de ocultar mi sonrisa.

-Pero como ves.. acá estoy- Se aleja un poco de mi y me mira en la mitad del pasillo. -Ve al baño tranquilo-

Lo miro sonriendo y asiento. Entro al baño y me apoyo en la puerta, suspirando leve.

Él es muy... muy.. indescriptible.

Una vez que salgo del baño, luego de hacer todo lo que tenía que hacer, me dirijo a la habitación de Mía. Abro la puerta y ella no está ahí. Salgo y bajo las escaleras.
La busco y al no encontrarla en el living, ni en el comedor voy a la cocina. Ahí no está ella, si no que está él.

-Javier... ¿Dónde está Mía?- Pregunto algo incomodo, mirándolo.

El sonríe mirándome. -Acaba de llamarla su madre, y está afuera.. con ella, no se si va ahora o mas tarde- Se levanta y observo su ropa. Un par de jeans negros ;demasiado ajustados; con una camisa blanca que no esta ni terminada de abrochar. Su pelo correctamente peinado, una gran sonrisa en su rostro.. vuelvo mi vista a abajo. Me gustan sus piernas; me gusta su forma de vestir; su forma de peinar, su sonrisa.. me gust..

-¡Volviii!- Grita Mía entrando a la cocina. -Lo siento Pedrito.. -Se acerca a mi y aprieta mis mejillas levemente. -Mi madre me va a venir a buscar más tarde...-

Muerdo mi labio algo nervioso, ya que mis pensamientos anteriores se fueron de mi mente. Trato de no pensar más en Javier; Basta Pedro; digo en mis interiores.

-¿Y yo ya debo irme?- Pregunto mirándola y me siento en el desayunador, frente a Javier. 

Mía se sienta junto a él y sirve jugo para los tres.

-Umm.. dentro de un rato viene mi madre- Dice. Tomo de mi jugo, y los observo a ambos. -No creo que quieras quedarte aquí con mi padre- Ríe y río falsamente con ella; Me encantaría quedarme. 

-Mejor me voy llendo...- Susurro bajando mi mirada. 

-No te vayas sólo- Dice rápidamente Javier. 

Levanto la mirada. -Pero, Mía no me puede acompañar.. se tiene que ir con su madre-

-Yo te llevo a tu casa.. Vé a buscar tus cosas- Me guiña un ojo e intento no sonrojarme. 


*********************


Una vez que saludo a Mía, me subo al auto con Javier. Él maneja cantando una canción de mi banda favorita; Arctic Monkeys. Golpeo el suelo del auto con mi pie, y tarareo levemente la canción. Siento la mirada de Javier sobre mi cada vez que paramos en un semáforo. 

Pasan y pasan más canciones, y continuamos cantando, pero yo canto mas seguro y con la voz mas alta.

Otro semáforo y vuelvo a sentir su mirada. Decido mirarlo y me sonríe cantando.. como si me estuviera cantando a mí. Muerdo mi mejilla, ahuecando esta, trato de no sonrojarme y miro rápidamente a la ventana. Se que me acabo de sonrojar, estoy sonrojado, lo sé.

Al llegar a mi casa, baja el volumen de la música y conectamos miradas. Me sostiene de la barbilla y besa tiernamente mi mejilla. Me sonrojo leve, y lo miro sonriendo. 

-Gracias por traerme hasta aquí, Javier.. nos vemos otro día- Digo.

-No hay de que.. y ojalá nos veamos pronto-

Bajo del auto, con mi mochila en brazos y lo saludo con la mano desde la puerta. Él toca bocina en forma de saludo y se va.

Entro a mi casa, y luego de saludar a mis padres, me dirijo a mi habitación. 

Una vez adentro, cierro la puerta y me recuesto en mi cama.

Que lindo es... Es tan bueno conmigo.. Y  me gusta tanto..


El padre de mi amiga.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora