Temido

Cap 17 Segunda Temp

Narra Peter

-No puedo creerlo- Dijo Javi susurrando viendo a Oriana y Julian discutir

-Yo sí, Julian es un idiota- Giré mis ojos a ella quien me miraba enojada.

-Por suerte nosotros nos tenemos confianza- Dijo ella sonriendo, un nudo se formó en mi garganta y solo quería gritarle que mi ex me daría un hijo, pero no quería levantar la tensión en la habitación. Tomé su brazo levemente y la guie a la puerta, no nos dio para despedirnos que Javi cincho de mi hacia fuera.

Narra Julian

Mierda, mierda, mierda, mierda.

Estaba en el mismo lugar desde que Oriana corrió sin querer escuchar nada de lo que tenía para decirle. Caminé lentamente a mi habitación, teniendo que cruzar por la de Oriana y escuchar su llanto.

Me tiré en la cama y abracé la almohada. Estaba siendo muy ridículo. Tomé mi billetera y mi teléfono y salí a caminar un poco.

La avenida estaba descontrolada y muchos autos iban y venían como si llevaran una embarazada dentro.

Embarazada.

Oriana estaba embarazada.

De mí.

La amo tanto.

Ahora quería llorar. ¿Cuándo me volví tan marica? Okey, sé que los hombres lloran, pero no es algo que acostumbre. Aquí no tenía junta, no sabía dónde exactamente estaban las bocas para comprar la droga, así que solo me conformé con un tabaco.

Cuando di la última calada, ya estaba de regreso en casa y, Oriana iba de salida con Fátima.

- ¡Julian! Oriana me llevará a comprar un vestido nuevo

Yo solo miraba fijamente a Oriana quien intentaba estar consentrada en su teléfono celular- ¿Si?

- ¡SI! es que hoy nuestros padres darán una noticia- Fruncí el ceño y dirigí mi mirada a Fáti.

- ¿Cómo?

-Si, por eso vamos a comprar ropa, deberías hacerlo, varias personas más vienen.

Mire el vientre plano de Oriana, me gustaría que sea varón, tal vez podría discutir el nombre con Oriana y ponerle Timothy, es lindo.- Tengo un traje dentro sin uso que compre hace un tiempo.

-Debe ser un traje de diseñador, la gente que viene es de una posición demasiado alta- Dijo Oriana viéndome de arriba abajo-. Y tú no tienes nada de diseñador- Volvió con su actitud de indiferencia y discriminación. Al parecer se defendía presumiendo su posición.

- No tengo dinero como lo tienes tú, no puedo comprarme las cosas que tu acostumbras, pero así te am...

- Pídele dinero a mi padre y cómprate un taje como la gente, no quiero pordioseros en mi casa- Me miró fijamente y comenzó a caminar con Fátima siguiéndola atrás sonriendo sin entender que carajos era pordiosero, después de todo eso era bueno. No quiero que mi hermanita escuche esas cosas de la que considera su "ídola"

Sabía que ella no era así, al contrario, cada que veía gente de problemas económicos hacia lo posible por ayudarles, pero de alguna forma se desquitaba conmigo de esa forma por haberle herido.

Entré frustrado y suspirando a la casa, caminé hacia riba y volví a tirarme en la cama y quedarme minutos hasta que golpearan la puerta.

-No quiero hablar con nadie- Mi actitud era como la de un niño de ocho años cuando le negaron un juguete. Aunque ya era costumbre para mí eso cuando estaba chico, mi madre jamás me compró un carrito. Lo primero que compre fue la moto y fue con el dinero de la droga que vendía.

- ¿Ni con tu mami?- Me giré y ella estaba frente a mi mirándome tiernamente, asentí haciendo puchero como lo hacía cuando aún tenía 10 años.-. Cuéntale a mami lo que te sucede- Dijo abrazándome y suspiré.

-No soy un bebé mamá- Mi voz quería salir firme, pero solo se quebró en el intento.

Ella se separó un poco y acarició mi mejilla- ¿Qué anda mal con mi pequeño?

-Oriana- Rompí en llanto

- ¿Pelearon? Ya se van a arreglar cariño. Ella te ama.
-Es que le oculté lo del embarazo de Sabrina

Ella suspiró

-Eso ya es pasado amor, debiste decirle, ella te cuenta todo a ti- Me reclamó

- Eso no es lo que me preocupa, lo que me preocupa es que ella está embarazada y piensa que no lo quiero.

- ¿LA EMBARAZASTE? Julian, creí que aprenderías la lección, es muy pequeña para ser mamá Julian.

-La amo y quiero una familia con ella mamá, no me importa quien se meta en nuestro camino, ella es mía y me va a hacer papá.

-Me alegra que esta vez sí quieras a tu hijo.

-Antes era muy joven- Susurré limpiando mis lágrimas-, y creo que no amaba como creía a Sabrina.

- A mí también me gusta más Oriana que Sabrina.

-Pero ahora ya la perdí, me dio una oportunidad para que le contará pero no la aproveche.

Narra Oriana

-Hola- Dijo Sabrina. Con Fátima entramos a la tienda de bebé por un vestidito para Melody.

- ¿Qué quieres?- Dije molesta, ella me miro sorprendida y luego agrego- Ya sabemos lo que queremos, así que solo iré a la caja.

-Espera, ¿te sucede algo conmigo?

- ¿Debería sucederme algo contigo?- La miré desafiante, aguantando las ganas de romper en llanto por ver lo hermosa que era, yo a un lado suyo quedaba como una foca travesti.

- No lo sé- Se encogió de hombros-. A mí no me interesa más Julian.

- Oh, estamos iguales. A mí tampoco me interesa.

- ¿Se dejaron? Se veían tan enamorados.

-Es un estúpido- Dije escupiendo las palabras con enojo, suspiré ablandé la mirada.

-¿Qué pasó?

- ¿Por qué debería contarte mi vida privada?

-Porque tengo un leve presentimiento que se pelearon por mi culpa

-No te sientas importante- Sonreí sínicamente-. No eres nuestro centro de atención.

-Solo intento ser amigable

- ¿Quién dijo que yo quería que lo fueras?- Suspiré nuevamente, estaba siendo muy grosera con ella. Mire a Fátima quien comía su helado tranquilamente mirando estados a pocos metros de mí-. Me ocultó que ustedes iban a tener un hijo. No me gusta que me oculte cosas.

- Julian era muy inmaduro en ese tiempo, no deberías juzgarlo.

-Lo juzgo por declarar que se puso feliz cuando se enteró que habías abortado ¿Qué clase de hombre hace eso?

- En ese tiempo solo nos importaba tener dinero para las drogas, él estaba peor que yo en eso, solo vivia con eso y metido en las calles recibiendo ordenes de quien tenía que matar para conseguir una docena de cigarros de marihuana.

-Estoy embarazada- Dije rápidamente.

- ¿Y piensas que él no te responderá, cierto?

Asentí tímidamente y una lágrima se deslizo de mi ojo.

-La vez que los encontré por aquí y tú te fuiste al tocador, me dijo cuan feliz estaba contigo- Me miro tiernamente y dudé si decía la verdad-. Te ama, Oriana. Como no llegó a amarme a mí.

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