I'm fifteen..

Noche de desvelo. -- Capítulo 6

Eran ya las 20:35 y no tenía señal alguna de Mateo, solo espero no haberle dado mal mi número. Como siempre pensé demasiado rápido, 20:36 y mi teléfono sonó. 

  - Hola cenicienta. - decía el mensaje de un número desconocido, al instante abrí su foto de perfil y comprobé que se trataba de Mateo y mi sonrisa ocupo toda mi cara.

  - Hola príncipe azul. - contesto lo más rápido posible. 

  - ¿Me has extrañado? - y adjunta a ello una carita sonrojada. 

  - ¿La verdad?... Es que no hahaha - Tenía ganas de pelear y hacer más divertida la conversación. 

  - Que lástima porque yo a ti si, y mucho. 

  - Pero si acabamos de vernos tonto. 

  - Lo se, pero me tienes hipnotizado y no paro de pensar en ti, por eso te extraño. 

Terminé de leer ese mensaje y me quedé quieta, no podía moverme ni un centímetro. No podía creer que el también pensara en mi todo el día como yo con el, y encima que me lo revelara. 

No me dí cuenta que tardé mucho pensando en eso y que Mateo estaba "en línea" esperando mi respuesta. 

  - En realidad tu también me tienes loca, no quiero ni puedo olvidarte un insignificante día. - Admito y me agarro la cabeza mientras muerdo mis labios lamentando haberle confesado eso. 

  - Ves que eres tierna cuando quieres, ojalá fueses así todo el tiempo, mala -.- .  - Me reprocha y yo río dentro de mí. 

Para hacer algo diferente decidí mandarle una selfie con cara "enojada" y le adjunto - Tu haces que actúe de esa manera, no es mi culpa -. 

Mateo también responde con una foto y luce fenomenal!, está sonriendo mientras que achina sus ojos a propósito y hace que sonría una vez más. - Si claro, ahora es mi culpa- responde. 

Mando otra foto intentando imitarlo -  Por supuesto que es su culpa señorito, yo actúo como usted actúa conmigo o todo lo contrario, lo se, te revolví todo ¿no?. 

  - Hahahah, eres tan linda, no se como pero entendí lo que quisiste decir, eres algo bipolar ¿no?.

  - No.. emm... si.. no lo sé... déjame en paz! hahahaha! - Respondo y noto mi sonrisa una vez más en mi rostro. 

Mateo manda una nota de voz riéndose muy suave y sensual. Escucho el audio unas 5 veces porque amo su voz. 

Respondo con una nota de voz también. - ¿Que hace mi querido príncipe azul? - y termino de hablar con una leve y tierna risa. 

Nuevamente responde con otra nota de voz - Aquí tirado en mi cama con algo de frío, hablando un una chica muy hermosa, ¿tu?. 

  - Lo mismo que tú, solo que hablo con un príncipe. 

  - Que suerte que tiene ese príncipe, habla con la chica las linda del reino. 

  - Hahahaha si claro, y tu chica hermosa se debe sentir muy especial también ¿no?. 

  - ¿Porque debería sentirse así..?. - noto su intención, pero no le doy el gusto -. 

  - Olvídalo ya haha. -Respondo intentando hacerme la misteriosa-. 

Entre tanta charla me doy cuenta que ya eran casi las 00:00 y que no tendría tiempo para dormir. 

  - No me dejes con la duda!!, no te hagas la misteriosa aquí. - Suplica con algo de desesperación-.

  - Buenas noches Príncipe!!. - Intento dejarlo con la duda y apago mi teléfono. 

No podía creer lo que había echo, ¿se molestará? no lo creo, supongo que entenderá la broma, en lo que mi cabeza es consumida por Mateo por fin me duermo.