Capitulo 1:

1.1K 105 87
                                    

Pov Panda.:

Los gritos y golpes por parte del padre y madre del pequeño Daryl, resonaban por toda la casa. El hermano mayor de Daryl no estaba, de seguro estaba drogandose en algun callejon.

Daryl al sentir como su padre gritaba su nombre, subio a su cama y abrio con dificultad la ventana, agradecia que la casa fuera de un piso, paso una de sus piernas, su cabeza y su otra pierna. Cuando estuvo afuera las gotas de lluvia lo mojaron haciendolo temblar pero cualquier cosa era mejor que tener que recibir golpes de su padre.

Corrio un par de minutos ensuciando y mojando sus calcetines blancos, cuando estaba agotado se hinco en una esquina, abrazando sus delgadas piernas y apoyando su mejilla en esta.

Quizas podria buscar a Merle, si tenia suerte su hermano le daria un puñetazo y lo dejaria quedarse junto a el, solo si se mantenia callado y en un rincon quieto.

Con eso en mente, el pequeño Daryl se levantaria y buscaria a su hermano, pero pudo ver frente a sus ojos unas botas azules de plastico, la lluvia se detuvo.

Levanto su cabeza con miedo, rezando para que no fuera su padre. Lo que se encontro fue una sonrisa calida, un par de ojos azules y un paraguas protegiendolo de la lluvia.

-¡Hola!-saludo el otro niño animado.

Daryl lo ignoro levantandose, el otro niño ladeo su cabeza confundido. ¿Seria sordo?

-Soy Rick.-Daryl volvio a ignorarlo.-¿Tienes hambre?

Pregunto el de rulos al ver la delgada figura del rubio, si no fuera porque llevaba el cabello corto, Rick hubiera pensado que era una niña...una muy linda.

Daryl asintio en silencio, bien, no era sordo, penso Rick.

El de rulos tendio su mano con un Sandwich, Daryl practicamente lo arranco de las manos ajenas.

Llevaba casi dos dias sin comer, su madre estaba muy ocupada curando sus heridas y su padre junto a su hermano estaban ocupados drogandose como para preocuparse de el.

Daryl mordio el sabroso sandiwch con rapidez y sin que se diera cuenta lo habia acabado.

-¿Quieres ir a mi casa? Mi madre se enfadara si me ve afuera.-apunto a una hermosa casa celeste a sus espaldas.-¿Como te llamas?

-D-Daryl.-murmuro lo mas bajo que pudo.

Daryl lo medito, no le veia nada malo. Sus padres estaban ocupados y estaba lloviendo. El rubio asintio y Rick lo tomo de la mano jalandolo a su casa.

Daryl en cuanto estuvo dentro se sintio avergonzado, la casa estaba limpia y tenia cosas lindas. La suya solo tenia vidrios rotos y rayones en las paredes pero el no se quejaba, su padre se esforzaba para que ellos tuvieran un techo sobre sus cabezas.

-¡Santos Cielos!-escucho un chillido agudo.-¿Que te ha pasado, criatura?-Daryl la miro confundido.

Era una mujer delgada con los ojos azules, unos labios carnosos y largas pestañas.

-Es mi madre.-susurro Rick dandole confianza.

-Solo...mis padres estaban ocupados y tuve que salir.-la madre de Rick parecio entender todo al ver los moretones en los palidos brazos de Daryl.

-Cariño, ¿Podrias prestarle ropa a...

-Daryl.-dijo el rubio.

-A Daryl?-Rick asintio fervientemente.

A los minutos Daryl estaba sentado en la cama de Rick, balanceando sus piernas.

La ropa de el chico le quedaba algo grande, las mangas de la camiseta cubria sus pequeñas manos. Eso le gustaba al rubio ya que asi no se veian esos circulos morados de sus brazos.

El Chico del Paraguas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora