Capitulo 9:

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Pov Daryl D.:

Empuje con mi mano la cabeza de Gareth sonriendo.

-Deja las idioteces. Venga, tu puedes coquetear mientras; dejame en la barra.-mi amigo asintio rodando los ojos y se fue a las mesas.

Me quede mirandole unos segundos y extrañamente me senti agradeci de tenerle. Era estupido, pero me sentia agradecido de que Gareth fuera mi amigo a pesar de que yo era un cretino hijo de puta.

*

-Oye, muevete. Ese es mi lugar.-dije mirando como un niño con cabello castaño estaba en mi lugar.

-No ocuparas dos sillas.-me sonrio y me jalo para que me sentara junto a el.

Yo no queria amigos, estos no existian. Solo estaban contigo un tiempo y luego se iban para no volver.

Me sente junto a el y este no dejaba de hablar. Me siguio al final de las clases y como no tenia buen caracter me giro dandole un puñetazo.

Cuando lo vi caer al suelo me senti un poco culpable pero...el se lo busco.

-Golpeas bien. ¿Por eso los demas no se te acercan?- dijo levantandose y sacudiendo su ropa.-Pero no me ire porque me golpees.

-¿Por que no?- dije presionando mis manos.

-Porque eres mi amigo. Aunque no quieras, ya lo eres y me tendras siempre contigo.-dijo con una sonrisa.

*

Sin duda Gareth siempre fue asi de extraño, aun lo era. Puedo recordar todas las veces que lo he golpeado e insultado y el aun asi se mantiene a mi lado.

-¡Daryl!-me gire y vi a la chica de ayer agitando su mano y acercandose con una sonrisa.

-¿Tara?-dije extrañado.

-Exacto. He vuelto.-dijo estirando su mano, yo con gracia choque nuestros puños.

La chica se sento y me comenzo a hablar sobre la chica que le gustaba, yo asentia o aveces le decia alguna cosa.

-Pero luego ya nose si decirle que me gusta, ella es simplemente, perfecta. Y yo, solo soy yo.-dijo lanzando un suspiro.

-Solo dicelo. No seas una cobarde.-dije y ella fruncio el ceño-Digo, ¿Prefieres quedarte con la duda?

-Me rechazara

-¿Y? Lo superaras.-dije para acercarme a otro cliente y entregarle su trago.

Gareth se puso a coquetear con un grupo de chicas y yo sin evitarlo sonrei, ese chico solo pensaba con el pene.

Me devolvi hacia Tara y este me miro con una sonrisa.

-¿Que?-dije pasando una de mis manos por mi rostro.

-Nunca te has enamorado, ¿Verdad?-me dijo con gracia.

-No. Eso es para idiotas, sin ofender.-ella rodo los ojos.-No lo necesito, lo que si necesito es este trabajo.

Ella me miro sin creerme el que no me interesara eso del amor y todas esas cursilerias, tomo la mochila que cargaba y saco unos cuadernos y un libro para comenzar a estudiar.

Rode los ojos, las chicas eran tan extrañas.

*

-¿Tu principe no te dejara en casa hoy?-se burlo Gareth.

-¿Celoso?-dije sacando un cigarrillo.-Mañana tenemos libre ya que no abren el bar los fines de semanas.

-Si. Tengo un par de citas, ¿Quieres una?-dijo sonriendo.

-Estoy bien.-Gareth hizo un mohin y tras ver que ya era mas de medianoche me revolvio los cabellos y se despidio caminando por su lado.-¿Tienes tu cita ahora?

Gareth se giro sonriendo.

-¿Que esperabas? Claro.-dijo para volverse a girar.

Acomode mi bolso y tras contar el dinero de las propinas que algunos de los clientes daban, tome el autobus.

Apoye mi cabeza contra la ventana fria del autobus, no queria llegar a casa. Sabia que pelearia con mi madre y aunque le dijera todas esas mierdas me sentia culpable luego. Soy un total imbecil.

*

Cerre la puerta tras mi espalda y vi a el viejo y mi madre discutiendo, casi llegando a los golpes.

Los ignore y segui mi camino a mi cuarto, pero mis pasos se frenaron de inmediato al escuchar un golpe, gire mi cabeza y vi a mi madre en el suelo con su pequeña mano en su roja mejilla.

Trague saliva y me meti al cuarto con rapidez, soy un cobarde, un maldito cobarde.

Pude oir nuevos golpes pero simplemente no me meteria, no era mi jodido asunto, no lo era.

Cubri mis oidos con mis manos y me deslice en la puerta hasta quedar sentado.

Ella debio hacer algo muy malo, ella era asi...¿no?

*

Sali del cuarto y los rayos del sol iluminaban toda la casa, Merle estaba en el sofa viendo alguna mierda en la television y mi madre cocinaba, camine al baño y busque lo que necesitaba.

Suspire frustrado, volvi a la sala y fui a la cocina, tome un vaso y lo llene de agua para luego dejarlo cerca de mi madre junto a unas pastillas para el dolor.

-¿Que es-?

-Solo bebetelo.-dije interrumpiendola.-No le digas a el viejo que hice algo por ti.

Ella asintio con los ojos llenos de lagrimas, vi las intenciones de abrazarme pero me aparte caminando hacia la salida. No volveria a ser ese niño ingenuo, aunque mi madre lo quisiera.

Mi celular vibro.

"-Te espero en la cafeteria, guapo-"

Sonrei ante el mensaje de Gareth, ese chico era muy idiota.

Tras comprar combustible, por fin volvi a subir a mi moto.

El aire me lanzaba el cabello hacia atras y pronto senti mi rostro frio al igual que mis manos.

Baje en la cafeteria y guarde las llaves en mis bolsillos, entra al lugar y rapidamente senti unas brazos envolverme.

-Hola, cariño.-dijo Gareth con gracia.

-¿Sabes lo que es el espacio personal?-dije y mi amigo simplemente nego apretandome mas.

Suspire y rode los ojos, Gareth me arrastro a una de las mesas y me di cuenta que estaba con Tara.

-¿Sois amigos?-dije confundido sentandome.

-Intento coquetear conmigo, hasta que le dije que era lesbiana.-me rei y Gareth golpeo mi hombro.-Ahora...seguiremos con el tema de ayer.

Rode los ojos, sabia a lo que se referia.

-¿Tan malo es que no crea en el amor y no me interese?-dije y Gareth me miro mal.-Tu solo follas, jamas has tenido nada serio.

-Si, pero aun asi se que el amor existe.-me dijo como si fuera obvio.

-¿Jamas te ha gustado alguien?-dijo Tara y yo levante la vista pensando para luego negar con la cabeza.

Ambos se miraron sorprendidos pero Tara sonrio y me miro, Gareth se levanto para pedir algo para comer.

-¿Que?-dije confundido.

-Al parecer el si sabe lo que es amor.-dijo con burla.

Gire la cabeza y vi a Rick junto a Morgan al fondo de la cafeteria mirando. Este sonrio avergonzado e hizo un gesto a modo de saludo.

Le regrese el gesto y me gire para quedar nuevamente mirando a Tara.

-Somos amigos.-dije alzando y dejando caer mis hombros.

-Si, engañate con eso.-se rio.

El Chico del Paraguas.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora