Smiling.

Capítulo 9: "Aquel Sentimiento... "

Narra Jade

Sinceramente no podría creer nuevamente lo que estaba sucediendo, Ayra estaba junto a mí, habíamos hablado hasta casi las cinco de la mañana, pero luego se quedo profundamente dormida.

No puedo explicar lo preciosa que luce al dormir, como su hermoso cabello se desordena en su sublime rostro, al compas de su leve respiración.

No puedo creer todo lo que ah tenido que soportar, y desde que era tan solo una inocente niña, ese maldito de Matt, que ganas de asesinarlo.

No puedo entender, como puede hacerle daño a una persona como Ayra, mas siendo una chica y sobre todo viendo todo lo que tuvo que sobrellevar.

No comprendo cómo puede ser tan fuerte, yo si perdiera a mi madre, mi mundo se desvanecería lentamente, y no soportaría vivir con mi estúpido padrastro de sonrisa falsa, y traje bonito.

...

Me fije la hora en el reloj que colgaba justo en la pared de la inmensa biblioteca.

Era ya las 10 de la mañana.

Me extrañe al notar que no habían abierto la biblioteca.

Me encamine rápidamente hacia una de las inmensas ventanas que se lucían en la majestuosa sala, corrí rápidamente la cortina y palidecí.

Las calles se encontraban inundadas, COMPLETAMENTE INUNDADAS.

El agua se había elevado hasta las puertas de los vehículos.

Esto era malo, realmente malo.

No se contemplaba ni una sola alma en toda la cuadra, tampoco se escuchaban ruidos de policías, ni ambulancias, solo se podía percibir el profundo y tenebroso silencio de la soledad misma.

Parecía como si el resto del mundo se hubiese evaporado.

Ok, eso era un poco exagerado...

Ayra comenzó a moverse rápidamente, se refregó los ojos e instantáneamente sonreí

Ella me miro sin comprender.

-Que sucede?. - pregunto confundida.

Yo solo volví a regalarle una sonora sonrisa.

- Qué?

- Nada, solo luces realmente adorable. Dije sonriendo nuevamente.

Su precioso cabello se encontraba completamente desordenado, cubriendo la mitad de su rostro.

Ella noto como la observaba, corrió sus inmensos ojos hacia su cabello, largo un sonoro grito y comenzó a peinarse desesperadamente con los dedos.

-Tranquila, solo estaba bromeando, pero de verdad te ves realmente adorable.

-Gracias? Musito algo incomoda.

...

-Así que nos quedaremos aquí, por un largo tiempo... -me sincere.

-Si eso lo sé, el problema es que mi estomago me está exigiendo comida.

-Si el mío igual, creo que ese es el problema.

-No lo creo. -Sonrió maliciosamente

-Que estas tramando? -Sonreí por la expresión de su rostro

-Sígueme.

Algo confundido la seguí hasta unas largas escaleras que estaban clausuradas.

-No podemos subir, allá no hay nada.

-Eso es lo que todos creen. Volvió a sonreír

Ella comenzó a subir las escaleras, yo la seguí aun más confundido de lo que ya estaba.

Abrí los ojos como platos, al observar una inmensa habitación, repleta de libros y estantes antiguos.

-No sabía que esto existía. Hable maravillado.

-Nadie sabe.

-Y tu como supiste? -Cuestione asombrado

-Créeme Jade, esta no es la primera noche que paso en la biblioteca. -Declaro abriendo una extraña puerta de madera que yacía detrás de un armario repleto de libros.

ME QUEDE AUN MAS PERPLEJO, ASOMBRADO, BUENO CREO QUE YA ENTENDIERON.

Era otra descomunal habitación, pero aun más hermosa.

Contenía unos diez estantes decorados con cientos y cientos de libros de cualquier variedad y genero.

En el suelo yacía una alfombra de tercio pelo, color roja.

Ayra, siguió caminando como si fuese lo mas normar del mundo, era obvio que había venido millones de veces a esta hermosa habitación secreta.

Ella desapareció por unos largos segundos, en los que comencé a desesperarme, pero luego me volví a sorprender cuando traía en sus brazos la adorada y preciada comida.

-Y esto?

-Digamos que me traje algunas provisiones que nos duraran por varios días.

Termino de decir para reposar en la mesa, tres diferentes variedades de galletitas.

...

Eran las seis de la tarde, y este día había sido realmente perfecto, a pesar de que estamos atrapados...

Ayra cada vez me sorprendía mas, realmente era una persona increíble y cada segundo me enamoraba más.

Si, señoras y señores como han leído, me enamore perdidamente de Ayra Khaleesi...