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J I N 


Los molestos rayos del sol que se colaban a través de las cortinas insistían en despertarlo, pero Jin solo se removía en su cama aferrándose a sus sueños. Él era realmente feliz dentro de ellos.

Escuchó una risa familiar provenientes del comedor y él, aún medio dormido, trató de prestar atención, ¿Hobi? Pensó. Cuando no volvió a escuchar ruido acomodó nuevamente su cabeza en la almohada. Estaba enloqueciendo, era imposible que alguien estuviera riendo, tal vez era porque aún no estaba bien despierto.

Nuevamente se escucharon risas, esta vez no sólo se parecía a la de Hoseok si no a la de Tae tambien. Jin sin pensarlo salió desesperado de su cama al comedor pero sólo abrir la puerta de la habitación derrumbó sus esperanzas al suelo quebrándolas en millones de pedazos.

Quería volver a su cama y que esta lo tragara para siempre. Estaba harto, solo quería vivir dentro de sus sueños, que, más que ilusiones creadas por su cerebro eran momentos ya vividos por él donde alguna vez fue feliz, sus recuerdos.

Se dirigió al baño pues a pesar de querer perder la conciencia entre uno de sus maravillosos sueños, seguía con vida y los seres humanos tienen necesidades, entre una de ellas, vaciar su vejiga.

Luego de lavar sus manos después de orinar se miró al espejo, no se sorprendió por su demacrado rostro adornado por unas oscuras ojeras bajo sus ojos o la delgadez que presentaba, sólo suspiro y pensó que así es como debía ser. Ya no quería su vida por ende tampoco su cuerpo o la salud que alguna vez poseyó y cuido.

Tocaron a la puerta del baño escandalosamente. Jin frunció el ceño algo molesto, era cosa de todos los días que lo interrumpieran cuando se encontraba en el baño.

- ¡Yah, Jimin! - gritó sin pensar antes en la situación que estaba - Cálmate, salgo en un instan...

Calló al darse cuenta de lo idiota que era. ¿A quien le estaba hablando? Lavó su rostro y volvió a suspirar. Primero eran risas, luego que tocaban a la puerta... ¿Lo estaban atormentando?

Si era así, estaba bien... Lo merecía.

Por último lavó sus dientes y salió del baño hacía la cocina. Prepararía el desayuno. No era como si el tuviera hambre lo haría sólo porque esa era su rutina y no quería romperla.

Buscó algo de pan, pues no haría nada muy elaborado.

- Jungkook... ¿Cuántas tostadas quieres?

Cuando nadie contesto, sonrío para si mismo negando con la cabeza. Pasó una mano por su rostro un poco desesperado. Lo estaba haciendo, estaba enloqueciendo.

Se olvido del estúpido pan y se preparó un café. Fue hasta el comedor y se sentó frente a la televisión. No estaba viendo nada realmente pero el sonido que emitía el aparato lo hacía sentir con algo de compañía.

Sintió unos pasos en la cocina. Y sabia quién era sin siquiera voltear a ver. Todos los días repetían la misma rutina. Jin realmente amaba su rutina mañanera, sabia perfectamente en que orden se levantan y que era lo primero que hacían al salir de sus habitación por ello no necesitaba ver quienes eran, podía deducirlo con exactitud.

- Namjoon, ¿podrías ver si Yoongi está despierto?

Nadie respondió y nadie lo haría. El único sonido en la habitación era la molesta voz del presentador de noticias y la horrible música de fondo. Apagó el televisor, quería comprobar si de verdad no había nadie en casa.

Jin no pudo hacer más que mirar al suelo cuando lo comprobó. Él estaba jodidamente solo. El departamento que alguna vez acogió a siete personas algo extrovertidas y ruidosas ahora estaba sumido en el silencio. Ahora solo albergaba a un alma medio muerta y agónica por la tristeza y la desesperación.

Dejó la taza en el suelo junto a él, tomó su rostro entre sus manos y se encorvó hacia delante.

Debía detenerse, dejar de escuchar y sentir que estaban junto a él cuando estaba solo. Estaba tan acostumbrado a hacer lo mismo cada mañana en compañía de sus amigos que la negación que lo envolvía y la desesperación por retroceder el tiempo lo hacia imaginar que ellos estaban ahí con él realizando lo que todos los días hacían.

Pero Jin no quería avanzar para enfrentar la realidad. Su rutina antes de que todo se desmoronara lo hacia feliz y sus sueños le hacían creer que su mundo aún seguía intacto. Quería aferrarse a la felicidad que alguna vez experimentó en vez de caer por completo en la obscuridad del vacío de su presente, que lo llenaba de una dolorosa agonía.

Atrajo sus piernas a su pecho y se abrazó a si mismo. ¿Cómo se supone que debía seguir viviendo? ya no quería permanecer a ese asqueroso mundo donde estaba todo podrido, ese mundo que le arrebató a sus queridos amigos, sus hermanos. Ellos eran la razón por la cual luchaba , sin ellos no había nada por lo que seguir existiendo.

Simplemente sin ellos, él no era nada.



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¿Hola?

Quería esperar a subir el primer capítulo pero simplemente no pude resistir las ganas de hacerlo jejeje.

Realmente no se si a quedado bien... O si debería haber comenzado asi pero de todas formas estoy feliz, no lo puedo evitar.

Por favor pasen y comenten!!! Quiero saber que opinan, las criticas constructivas siempre serán bienvenidas!

❤❤❤ ❤

Butterfly ❆ BTSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora