Cap 16:

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-¡INVITALO, INVITALO!- gritaba Luka mientras sacudia a Neru, estaba intentando convencer a Neru para que invitara a Rei a su casa.

-¡NO, TÍA LUKA!- respondió Neru prácticamente revuelta.

-¡Déjala!¡Vendrá otro día!- gritaba Gakupo aterrorizado de aquel extraño comportamiento de su esposa.

Luka lo miró endemoniadamente causando que Gakupo se asuste más. Neru escapó de Luka y salió corriendo.

Corría por su vida, se quedó a descansar en el parque, que no estaba tan lejos de la casa de sus tíos, pero Luka no se rindió tan facil y la siguió. Era una persecución, literalmente.

Se encontró con Miku nuevamente. La empujó hacia la pared quedando a su lado contra la pared.

-No hagas ni medio ruido, ella me matará- le susurró Neru.

-¿Q-Quién?- preguntó asustada Miku, temblando del miedo.

-No hay tiempo para explicar nada-.

-¿¡DÓNDE ESTÁS, NERU!?- gritaba Luka por todos lados buscando a Neru.

Miku y Neru salieron corriendo del parque, directo a la casa de Miku. Luka las detuvo antes de entrar y Miku no entendía nada de lo que pasaba.

-¡T-TENGO UN PUÑO Y SÉ COMO USARLO!- gritó Miku desesperada por salir de ahí.

Derrepente un pañuelo cubrió la cara de Luka, haciendo que se desmaye. Luka cayó, revelando el rostro de aquél salvador.

-Disculpenme por el comportamiento de mi esposa- dijo Gakupo con una sonrisa nerviosa, mientras sostenía el cuerpo de Luka.

-Gracias a Dios la detuviste, Gakupo-oji- le dijo Neru agradeciéndole.

-No es nada- dijo rascándose la nuca con una mano -Si me disculpan, la llevo a casa-.

-Adiós- le gritaron a lo lejos Miku y Neru.

Con Rin...

Rin estaba tirada en la cama, mientras abrazaba al peluche de piña. Había asegurado la puerta con llave a esperar que volviera Neru.
Finalmente llegó su tan esperada amiga y esta antes se entrar a su habitación escuchó los sozollos de su amiga y al rato supo que le había pasado.

Antes de entrar comentó gritando.

-¡GRANDE, NERO!-.

Rin abrió la puerta y Neru pudo apreciar los ojos llorosos y la nariz roja de Rin. Estaba claro que había llorado...

Rin sollozó -P-perdón- susurró cabizbaja.

-¿Por qué?- le preguntó Neru.

-Por ser tan llorona...- susurró nuevamente.

Y Neru estuvo todo el resto del día consolándole. Rin quizo bajar a comer algo y le pidió a Neru que la acompañara. Nero se vió preocupado por Rin e intentó ayudar.

-¿Puedo hacer algo?- preguntó al pasar al lado de Neru.

Neru lo abofeteó -En tu cara, Baka- dijo.

Nero se sobó el cachete.

[...]


La chica de ojos dorados {Editando}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora