This Is The One?

Capítulo 15

- Son 85 con 99, por persona y tendrán que estar una hora antes del recorrido- nos informa la señora de camiseta azul con el nombre del parque.

Sacó el dinero, pero Aaron detiene mi mano en el acto cerrándola suavemente en un puño.

- Te encanta sentir esas vibraciones, ¿verdad?- dice.

- Thomas pagara el de Brooke dame el honor de invitarte también - insinúa mirándome a los ojos.

Vaciló un momento y asiento con mi cabeza.

- Aquí están sus pases podrán elegir el suyo - nos entrega la boleta.

Pasada la hora de espera nos guían hacia los establos. Mis nervios no me dejan pensar claramente, ya que la última vez que cabalgue fue con papá meses antes de que muriera.
Aaron se da cuenta de mi nerviosismo y entre laza sus dedos con los míos, a los pocos segundos me da un apretón.

Los caballos empiezan a relinchar.
En el fondo del establo divisó un caballo negro y alborotado. Me separó de Aaron y camino hasta él, al estar justo al frente de este veo el nombre que esta pintado en la madera: Phenix.
Acercó mi mano, acarició su cabeza lentamente y sin querer hago que se tranquilice.

- Creó que le gustas- sonríe.

- Así quien lo dice además de ti- bromeé

-¿Miguel?- se escusa

- Así, y ¿quien es ese? " Miguel "- digo siguiéndole el juego.

Encogió los hombros y se dirigió donde estaban Aaron y Brooke charlando de algo, que si tuviera súper oído escucharía.

Abrí la puerta de donde estaba el caballo y lo saco. Note que ya todos habían elegido un caballo.

El guía acomoda la montura y lo demás. Me pone una escalones pequeños para poder subir, ya que no soy lo suficientemente alta para subirme por mi misma, pero después de unos cuantos segundos me rindo.

- Eres como una hormiguita sin su colmena- escuchó la voz de Aaron a unos metros de mi.

- Para que sepas colmena es para las abejas y para las hormigas es hormiguero - le informe.

- A clarooo. Bueno, ¿quieres que te de el secreto para montar al caballo?- preguntó.

No respondí intente una última vez más subirme, pero esta vez termine con un poco de tierra en mi pantalón.

- Bien, da igual tanto misterio- razone.

- No te escucho- artículo lentamente con sus labios

- ¡¡Bien!!- grito.

- Primero tranquilízate, segundo cierra los ojos y por último da un pequeño salto- dice tranquilizando me.

Hago cada paso un poco extrañada y al llegar al último, siento como un mano me sostiene de la cintura y me sube. Sin pensar paso la pierna al otro lado de la montura, al estar estabilizada la mano baja lentamente hasta mi cadera presionándola suavemente, siento como mi pulso se acelera ya que lo que esta haciendo exalta mis nervios cada vez más.

- Ya puedes abrir los ojos- susurra en mi oído. Haciéndome sentir su respiración pasiva en la oreja.

Los abro y veo como mira directo a mis labios durante 2 segundos intensamente eternos.
Se separa y se aleja, pero antes de subirse se da la vuelta para darme una mirada llena de complicidad y ternura. DIOS, ESTE HOMBRE ME ESTA MATANDO.

-Bien- dice el guía subiendo a su caballo como un experto. A claro como el si puede lo presume, ¿no?

-Hoy haremos un recorrido de aproximadamente dos horas- dice el hombre. Uh, pobre caballo. Yo voy a sufrir es de la espalda. Pero el pobre debe soportar mi peso por dos horas. Lo compadezco. El hombre chiflo y el caballo su caballo comenzó a andar. Todos salieron uno por uno. Bien. Ahora, ¿como saco al caballo del establo?; necesito un manual.