¡Demigod Survive!

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Percy POV:

Es viernes por la tarde, eso solo significa una cosa: Captura la bandera. Mi cabaña tenía una alianza con las de Zeus, Atenea, Hermes, Apolo, Deméter y Dionisio, éramos el equipo azul. Las cabañas de Ares, Hefesto, Hades y Afrodita eran el equipo rojo.

"Las cabañas de Hermes, Apolo y Dionisio defiendan la frontera. La mitad de las cabinas de Deméter y Atenea dirijan un ataque por la derecha, la otra mitad por el centro. Thalia, Percy, los Stolls y yo iremos por la izquierda. Will, te quiero sobre un árbol apartando todo lo que se acerque a la bandera con tus flechas. Malcolm, tú también te quedaras para defender la bandera". Nadie discutió las órdenes de Annabeth y nos colocamos en nuestras posiciones. En tanto sonó la caracola nos escabullimos por un costado del bosque. Estábamos llegando a la frontera cuando nos topamos con tres hijos de Ares. Annabeth pareció predecir eso porque me jaló de la mano y dejo a los Stolls y Thalia después de intercambiar un par de miradas con esta última. Junto con Annabeth corrí hasta el puño de Zeus, donde estaba la bandera del enemigo.

"Ve" oí la voz de Annabeth pero antes de poder decir algo ella me pateó para que me acercara. Alcé a Contracorriente se veía muy sospecho que no hubiera alguna defensa. Logre tomar la bandera y comencé a correr de regreso. Una corriente eléctrica me derribo. Parada frente a mí estaban Clarisse y su maldita lanza.

"Que tonto eres". Arrojo la bandera a un lado y me dio la vuelta con su pie. "¿Estás solo Jackson? Pobrecito". Esperaba que Annabeth se encontrara cerca pero no la veía por ningún lado. Clarisse seguía moviéndose alrededor de mí sin separarme su lanza del pecho mientras alardeaba. "¿Cómo te venceré esta vez? Ya lo sé. Levántate. Esto no es divertido si no hay lucha". Me dejo levantarme y enseguida se lanzó contra mí. Me lanzaba tajos a diestra y siniestra por lo que tenía que moverme rápido a menos que quisiera convertirme en salmón ahumado. Cuando al fin se detuvo fue mi turno de atacar, lancé un mandoble el cual paró fácilmente, la aleje con una finta y una estocada. Chocamos metales forcejeando el uno con otro, siendo una hija del Dios de la guerra sabía que no iba a ser fácil que se rindiera. Se me empezaba a adormecer el brazo cuando algo llamo mi atención. Annabeth corría con la bandera hacía la frontera. Clarisse se aprovechó de mi distracción y me derribo.

"¿Ves? De cualquier manera siempre gano". Annabeth me guiño el ojo y se puso su gorra de los Yankees antes de desaparecer. Solo veía la bandera moverse por detrás de Clarisse y ella no se daba cuenta lo que provocó que soltara una carcajada. "¡¿De qué te ríes Jackson?!"

"¿No te das cuenta cierto?" dije burlándome para hacerla enojar aún más. Me aseguré de que Annabeth estuviera lo suficientemente lejos para poder restregárselo en la cara. "¿En serio crees que vas a ganar este juego si no proteges tu bandera?" Volteo para darse cuenta de que su bandera había desaparecido y estaba corriendo hacía el claro. Bufó antes de darme una patada en el pecho y salir corriendo tras ella. En ese momento Annabeth ya se había materializado y corría hacía la frontera entre vítores esquivando a todo el que se las atravesaba. No pude evitar mirarla. Su pelo rubio, la destreza con la que manejaba su cuchillo y esos bellos ojos tormenta que se oscurecían cada vez que se concentraba o luchaba. Sin duda era hermosa. Estaba tan embobado admirándola que ni siquiera me di cuenta de que habíamos ganado hasta que Grover me dio un codazo en las costillas.

"Haber enamorado, deja de verla y vamos a la fogata" dijo rodeándome con un brazo por encima del hombro.

"¡No la estaba viendo!"

"¡Pero claro que lo hacías! ¿Lo olvidas? Sátiro. No puedes ocultarme nada, además es muy obvio que te gusta". No pude evitar sonrojarme lo que hizo que la sonrisa de Grover se ensanchara más.