¿Qué estaba pasando con Soo Min? ¿Por qué ella...?
Su anterior comportamiento era dulce y tímido, pero ahora...
No sólo hablaba de cosas que antes parecía incapaz de mencionar, sino que además era agresiva.
¿Qué estaba pasando con ella?
Decidí que tenía que preguntarle, aún si el tema le incomodaba, tenía que saber que estaba pasando con ella. Si tenía algún problema, si su cambio de actitud tenía que ver con su padre...
Así que dejé a Chin Mae, quién me miraba con los ojos llorosos, al cuidado de sus amigas y fui detrás de Soo Min y Sung Jong. Y sin poder evitar pensar que al final la chica había obtenido lo que se merecía.
Salí a la parte delantera de la propiedad, observando una docena de autos que no había visto antes, preguntándome brevemente de quién serían antes de echar a andar directo al jardín especial de la señora Lee. Una parte mía con la seguridad de hallar a mi prometida ahí.
Y sí, la hallé, habiendo preferido no hacerlo, sobre todo al verla riendo a carcajadas en los brazos de Sung Yeol. Contrario a lo que había hecho la vez anterior que presencié una escena similar sólo me limité a mirar, anonadado. Y era por ella. Por esa enorme y feliz sonrisa que exhibía en su bello rostro de porcelana mientras jugueteaba con él.
—Que gran idiota eres, Yeollie —la escuché decir y me sentí aún mas confundido.
¿Desde cuándo Soo Min decía palabrotas?
—¿Tú repartes puñetazos y yo soy un idiota? —gruñó Sung Yeol y sin más la derribó sobre el pasto, quedando justo encima de ella.
Me removí con el corazón en un puño, listo para intervenir, pero me ganó otra persona, alguien en quién no había reparado y que casi había olvidado que estaba ahí.
—Soo Min, tu ropa...
Era la suave voz de su gemelo, inclinándose un poco para tomar la mano de Soo Min y ayudarla a levantar. Pero al hacerlo me descubrió, nuestros ojos cruzándose mientras que su rostro se teñía de rojo. Y ese gesto fue aún más confuso para mí. Porque hizo latir mi corazón con fuerza, porque ese rubor me era demasiado familiar...
Sung Jong abrió la boca, quizás para delatar mi posición, pero no llegó a emitir sonido alguno. Un chillido divertido salió de la boca de Soo Min mientras intercambiaba lugares con Sung Yeol, quedando arriba ella esta vez.
—Te puedo vencer cuando quiera, Sung Yeol.
Y le dio un suave puñetazo en el hombro, Sung Yeol sin apartar sus ojos de ella, cuando yo lo único que quería era dejar de mirarla.
—Soo Min, levántate.
Habló Sung Jong, tirando de su hermana, pero sin dejar de mirarme, con los ojos llenos de pánico. Un pánico que ya había visto antes...
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Gemelos
FanfictionCuando la familia Lee está a punto de irse a la quiebra un matrimonio obligado entre su única hija, Soo Min; y el heredero de los Kim, Myung Soo, parece la única solución. Sin embargo unos días antes de la esperada unión la joven desaparece... Pero...