Romeo y Julieta 3 I ONLY WANNA LIVE IT WHIT YOU

17

KATHERINE

James abrió la puerta de la casa mirándome con las cejas casi juntas en una sola, negó lentamente con la cabeza, en desaprobación con mi acto de escape.

-Esta vez fuiste demasiado lejos, hermanita -susurró en mi oído mientras pasaba a su lado.

Mi madre se puso de pie en cuanto me vio, sinceramente la culpa comenzaba a comerme poco a poco por dentro.

--¡Kathe! --chilló.

--Lo siento --le susurre mientras ella me abrazaba con fuerza excesiva-- me quede sin batería, fui a casa de Shania, lo siento mamá, debí avisarte a ti o a papá, quise llamar de regreso desde el elegido de Shania pero el tiempo se me paso muy rápido, papá y Harry por suerte fueron a casa de Shania y me encontraron, lo siento mucho mamá

Mi papá me había repetido tantas veces durante el camino a casa lo que debía decirle a mi mamá, que me lo aprendí de memoria.

--No vuelvas a hacer Katherine

Sus ojos verdes y vidriosos por llorara tanto me lastimaban, sí tan sólo ella supiera a verdad... Quizás ella me entendería.

-- ve a tu cuarto Kathe --la voz de mi papá venía detrás de mi.

No quería mirarlo, ni a él, o a Harry, y tampoco a James que se estaba poniendo en mi contra todo el tiempo.

Sin decir nada más asentí con la cabeza y jale mi mano del agarre de mamá.

Mientras subía las escaleras nadie habló, podía sentir las miradas de todos apuñalandome la espalda, señalándome como una mala hija, la que se escapa de su casa para eres a escondidas a la media noche con un delincuente juvenil, esa era yo.

Mi móvil había sido confiscado por mi papá, de modo que mi única manera de comunicarme con Mark era por Facebook. Antes de que también me quitaran mi computadora o me privarán de internet.

Rápidamente me sequé las lágrimas y encendí la laptop. Estaba tardando demasiado tiempo en encender para mi gusto, y para cuando porfin encendió abrí rápidamente mi cuenta.

M.M
Mark, creo que lo mejor sería dejar de vernos por un tiempo, de cualquier forma me tendrán más vigilada que nunca. Mi celular ya no es mío ahora, y seguro que también me quitaran la computadora, por favor pase lo que pase nunca te olvides de mi y no renuncies a mi que yo jamás lo haré.

Te amo.
Kathe.

Mis nervios estaban a flor de piel, tanto que estuve a punto de cerrar sesión cuando vi que la respuesta de Mark ya había aparecido.

No seas tonta Khate, jamás te olvidaría, pero tampoco puedes pedirme que me aleje de ti, sabes que eso no es posible. Mañana iré a buscarte al colegio, no aceptare un no por respuesta, me conoces y sabes que las cosas no se quedarán así.
También te amo.

Mark
Por favor, hazlo por mi, no quiero que las cosas se pongan peor de lo que ya están, deberías entenderme.

El mensaje había sido leído por Mark, sin embargo jamás respondió.

Borre la conversación por sí mi padre decidía quitarme la laptop, y decidí esperar el momento en que apareciera para llevársela, sin embargo me quede dormida.

A la mañana siguiente me sorprendió la naturalidad con la que mi familia actuaba, era como sí no hubiese pasado nada la noche anterior, mis padres, como de costumbre no dejaban de profesarse el amor que sentían el uno por el otro. Y mi madre fue quien me llevó al colegio.

Mientras pasaba por los pasillos James se alejó de mi como sí yo fuera la peste más asquerosa del mundo, no se despidió de mi como siempre lo hacia.

Mi primer clase era literatura y me gire hacia el pasillo que me llevarla hasta ahí.

Sin embargo, cuando ya casi llegaba, algo jalo mi brazo derecho, ocasionando que cayera de rodillas dentro del cuarto de limpieza que marcaba un letrero con letras negras Sólo personal autorizado.

Gemí de dolor y una mano fuerte me cubrió la boca, abrí los ojos tanto como pude, estaba asustada.