Hot as fire, cold as she [Fairy Tail]

La Casa de Natsu y Happy

-¿Tu hermano? - dijo el de cabellos oscuros - No sé quien podría ser.

-¿Tienes un hermano, Lia? - me preguntó Natsu

-Si - murmuré - Por eso viene a Magnolia. Me dijeron que podía estar aquí. Pensé que podría estar en Fairy Tail, pero... No lo encontré.

-Tal ves se unió a otro gremio. - dijo Levy - ¿Cómo se llama tu hermano?

Hacía mucho tiempo que no mencionaba el nombre de mi hermano mayor. Más o menos 13 años que no decía su nombre, desde que yo cumplí 6 y me alejaron de él. Se me hacía terrible tener que volver a recordar todo eso.

-Él es... - quise decir su nombre pero las lágrimas me ganaron.

-Está bien - dijo Natsu - Si te hace daño será mejor que no lo digas. Encontraremos a tu hermano pronto. Te lo prometo. - él sonrió y a mí me invadió una sensación cálida que me hizo sonreír

Lucy le dio un golpe al de cabellos oscuros y Natsu.

-No se supone que deberían estar aquí. - les dijo - Gray, no lo esperaba de ti.

-Natsu insistió en que quería ver... - pero Natsu calló a Gray de un solo golpe

-Íbamos a ver a Gajeel - dijo Natsu con una sonrisa

-¡¿Y qué hacen aquí?! - les gritó

-Ese es otro tema - respondió Gray recuperándose del golpe de Natsu

-Será mejor que nos vayamos - le dije a las chicas - Está oscureciendo.

Los chicos se fueron corriendo a cambiarse de ropa. No me había percatado, pero yo había estado envuelta solo con una toalla y había estado frente a Natsu y Gray. Me ruboricé y corría a los vestidores de damas.

***
Había recogido todas mis cosas de la habitación de Lucy y me disponía a buscar un lugar donde pasar la noche cuando me encontré con Natsu por la plaza.

-¿A dónde vas? - me preguntó mientras caminaba a mi lado

-A buscar alojamiento. - le respondo

-¿Acaso Lucy...?

-No, no me botó, pero no quiero incomodar, prefiero buscar otro lugar donde quedarme.

-Miko se va a quedar con nosotros. ¿No prefieres quedarte con Happy y conmigo?

-No, gracias, como te dije...

-A mi no me incomoda. Me agradaría que te quedarás conmigo.

-No lo creo...

-Vamos, será divertido.

Él tomó mis maletas y se encaminó fuera de la ciudad hacia el Bosque del Este.

-Natsu, ¿tan lejos queda tu casa? - le dije mientras apartaba algunas ramas de mi camino

-No, ya llegamos. - él se detuvo y sonrió triunfante.

La Casa de Natsu se parecía a un bungalow de color amarillo con una chimenea de ladrillo y algunos elementos decorativos de la puerta y las paredes. El techo está cubierto de tejas rojas. Podría ser una casa muy bonita, si no un árbol que crece en los muros y el cráneo suspendido por encima de la puerta. Cerca de la casa también hay una placa con los nombres de los residentes: Natsu y Happy.

Jardín o mejor dicho, el área alrededor de la casa es tan descuidado como era. Un carril está llena de nada, una cerca que se está desmoronando. Las únicas plantas que se pueden ver, son un pocos árboles marchitos.

-Esta es nuestra casa - dijo victorioso - Miko y Happy ya están adentro, sólo faltabas tú.

-¿Tenías planeado que iba a venir? - le pregunté

-De hecho.... Si.

Natsu abrió la puerta y me dejó pasar. De las paredes colgaban dos hamacas a un lado había un sofá, del otro había una caja con materiales de construcción, sobre la pared también había un gran tablero con algunos trabajos, habían muchas cosas más que no me llamaron tanto la atención.

-¡Natsu! - era Happy que llegaba desde la cocina junto con Miko.

-Lia-san, me convencieron y...

-Si, a mi también me convencieron.

-Lia, ¿tienes hambre? - Natsu se estaba abarrotando con una pierna de pavo con una mano y con la otra estaba sosteniendo un vaso de jugo.

-No gracias. - dije acomodé mis cosas contra la pared - Preferiría dormir un poco.

-Claro. - dijo y yo me acomodé en una de las hamacas - Duerme bien.

***
Desperté. Natsu estaba roncando sobre la mesa sosteniendo el hueso de la pierna de pavo de anoche. Happy dormía en la otra hamaca junto a Miko.

Había una manta que no se estaba usando, así que la tomé y cubría con ella a Natsu. Él dejó de roncar, se removió un poco pero siguió durmiendo. Me enterneció, no pude evitar sonreír y acariciar su cabello. Su cabello era muy suave, parecía algodón de azúcar. Natsu se estremeció, sonrió y no dejó de dormir.

Salí a tomar un poco de aire. Pasaba por el cielo una bandada de pájaros que pasaron cantando... una alegre melodía.

Caminé por el sendero hasta que llegué a un río tranquilo. Un buen río donde poder darme una ducha.

Me desvestí completamente y después de verificar de que no había nadie a los alrededores, me sumergí en el agua. Me estaba dado un buen baño relajante con las cristalinas aguas cuando escuché la voz de Natsu llamándome.

-¡Lia! - gritaba él y se detuvo frente a las orillas del río. - ¿Por qué rayos tu ropa esta aquí? - él cogió mi ropa interior y le dio vueltas.

Fue ahí cuando reaccioné y me escondí tras una gran roca que estaba cerca.

-¡Natsu! - grité tras la roca - ¡Deja mi ropa! - yo me había sonrojado totalmente

-¿Eh? ¡Esa roca me está hablando! - lo escuché reír

-¡Natsu! ¡Volteate! - ordené

-¿Qué? ¿Por qué?

-Voy a salir, ¡volteate!

Eché un vistazo y él ya se había volteado y se estaba cubriéndose los ojos. Rápidamente tomé mis ropas y me vestí.

-¿Ya acabaste? - dijo Natsu un poco molesto

-¡Espérate! - grité y terminé de colocarme los shorts. - Bien, ya.

-¿Tanto demoras para vestirte? - me preguntó bromeando pero yo lo fulminé con la mirada

-Para empezar no debías estar aquí... - le dije furiosa

-Bueno, tú me despertaste... - me sonroje al recordar que había acariciado los cabellos de Natsu y este había sonreído.

-Mejor vámonos antes de que termine matándote y arrojándote al río.

-Vale. ¿Vamos a tomar un trabajo? - sugirió - creo que te va a asentar bien.

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