La preocupación me atormentaba, no tenía ni una pista de donde podría estar; el hecho de que esos cazadores estuvieran detrás de él no me agradaba, y me daba mala espina la idea de que él fuera el asesino de la chica de la carretera, ¿y que tal si lo fuera? ¿Qué iba a hacer entonces? Pero en realidad lo que más me preocupaba era que iba a hacer para encontrar a Adam y evitar que algo le pasara.
¿Qué peligro se supone que me aguardaba ahora? ¿esta vez me tocaba proteger a Adam? La verdad ya estaba cansada de tanto batallar, ¿cuándo iba a ser el día que iba a salir de toda esta locura paranormal? Pero en el fondo sabía que mientras siguiera en Sioux Falls o cerca de los chicos, esa historia iba a continuar. Lo peor de todo es que ellos eran parte esencial de mi vida, los quería demasiado como para querer apartarlos de mí, luchaba diariamente con el sentimiento de amor y desamor hacia Adam, me había desgastado mucho emocionalmente tratando de alejar a Adam de mí, y lo había logrado, prácticamente se había esfumado, hasta el punto de desaparecer, pero realmente eso no era lo que quería, lo quería tener cerca, sabía que era mucho pedir para él. Era una situación muy complicada, pero lo que deseaba era encontrar a Adam.
La angustia y la intranquilidad me tenían loca, iba a abrir una zanja en el suelo de caminar de un lado al otro en mi habitación, miré a través de la ventana y estaba empezando a oscurecer, abrí mi closet, busqué una chaqueta negra y una bufanda gris, tomé mi celular, mis llaves y salí de casa a caminar, hacía bastante frío afuera, hacía mucha brisa, saludé a un par de vecinos que llegaban de sus trabajos, como si nada pasara en el mundo. Caminé y caminé hasta que decidí ir a visitar a Simon, a ver si se me despejaba la mente. Tomé un taxi que iba pasando hasta la Clower Avenue, me bajé justo en frente de la casa de los Morris, era bonita, amarillo pálido con detalles en blanco y marrón. Le pagué al taxista y me dirigí a la puerta de madera del frente y toqué el timbre, abrió una muchacha de unos 16 años
-Hola, buenas noches, ¿estará Verona o Andrew?
-Sí, ¿quién la busca?
-Alexandra Torres... Alex, diles que Alex_ en eso se escucharon unos pasos en las escaleras
-¿Quién es Abby?_ era una voz masculina, pronto se descubrió quien era_ ¿Alex? ¿Qué haces aquí? Pasa adelante_ sonreí amablemente
-Hola Andrew, disculpa la hora, solo estaba caminando cerca y pensé en visitarlos un rato nada más
-Me parece bien. Ella es Abby la niñera de Simon. Abby ella es amiga de la casa
-Mucho gusto, Abby_ era una muchacha de complexión física rellena, mejillas abultadas, mirada dulce, peliroja, pecosa, tenía una sonrisa de ángel se podría decir_ si me disculpan voy a seguir trabajando
-Abby por favor trae a Simon para que Alex lo vea, sé que es su amiga por lo que me ha contado Verona
-¿Y Verona?
-Está en casa de sus padres viendo a su padre que está algo enfermo, debe regresar más tarde. Toma asiento_ me senté en la sala, la casa era amplia
-¿Qué tal el trabajo en la primaria?
-Bien, fuerte, los chicos consumen enormemente_ en eso llegó Abby con Simon, se puso en frente de mí, apenas me vio estiró sus brazos para que lo cargara, eso me llenó de alegría
-¡Hola Simon! Tenía días sin verte, ¿cómo estás?_ sonreía haciendo ruidos de bebe que me encantaban, nos hacía reír a todos en la sala
Estuve alrededor de una hora con ellos allí conversando y conversando, jugando con Simon, era increíble la paz que Simon aún me brindaba, eso se lo iba a agradecer aun siendo un bebé
-Es tiempo de marcharme, ya es tarde..._ me levanté con Simon en los brazos
-¿No vas a esperar a Verona, o cenar? Aún es temprano
-No gracias Andrew, luego vendré con más tiempo_ caminamos hacia la puerta y le di a Simon_ Gracias...
-¿Por qué?
-A ambos, ¡gracias Simon!
-No lo entiendo...
-No te preocupes, gracias por recibirme un rato. Saludos a Verona, por favor
-Con todo gusto Alex_ me despedí de Simon con un beso en su frente y me alejé hacia la calle, cuando noté que Andrew había cerrado la puerta y escuché el llanto de Simon desde adentro
-Awww... pronto te vendré a ver de nuevo..._ dije en voz alta viendo hacia la casa
Me eché a caminar, el frio se había intensificado, eran cerca de las 8.30 de la noche, las calles estaban solas, eso era algo extraño, caminé varios metros esperando que algún taxi pasara para irme a casa. Una brisa fría y fuerte me azotó, lanzando mi cabello contra mi cara, logré despejar mi cara mientras caminaba, sentí que alguien venia caminando detrás de mí, voltee y no había nadie <<Extraño>> continué caminando acelerando un poco el paso, volví a voltear y no había nadie, volví al frente y tenía a un hombre justo delante de mí, me puse nerviosa, mi corazón empezó a acelerarse, el hombre en cuestión respiró profundamente y sus ojos se llenaron de sangre_ ¡Ay no...!_ Traté de correr en dirección opuesta pero me interceptó inmediatamente_ ¿qué quieres?_ toqué mi cuello desesperada en busca de mi collar pero no lo tenía puesto, al parecer se me había caído. El vampiro desapareció de repente y aproveché de salir corriendo_ ¡AUXILIO!_ algo me cortó el brazo, pero no vi lo que era_ ¡Déjame en paz! ¿Qué quieres de mí?_ me detuve hiperventilando, me dispuse a seguir corriendo a pesar de saber que era inútil cuando sabía que un vampiro era el triple de veloz que yo. Me volvió a interceptar tomándome por los brazos, sus colmillos sobresalían ferozmente, me miró unos pocos segundos y clavó sus dientes en mi cuello_ ¡¡¡NOOOOOOO!!!_ sentí un dolor indescriptible, sentía cada gota de sangre que salía de mi cuerpo, era desgarrador, no me podía liberar de él. Me fui desvaneciendo poco a poco, hasta ir perdiendo fuerzas y el sentido hasta que todo se borró por completo.
ine-heҥ
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Metamorfosis
FantasyLa tercera entrega de la Saga "CIELO, TIERRA E INFIERNO". NO EMPIECES A LEER "METAMORFOSIS" SIN HABER LEIDO "CIELO, TIERRA E INFIERNO" Y "CLARIDAD Y OSCURIDAD". Tras sufrir la muerte de su hermano mayor Andres, la de su mejor amigo y posible nuevo a...