16.Perdidos.

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—¡Oh gracias Nash! Por tu culpa ahora estamos perdidos en medio del bosque —resoplo cansada. —y encima hace frío.

—Yo puedo ayudarte a entrar en calor. —insinúa Nash tan tranquilo.

Me pongo roja pero decido ignorarlo.
Estoy de los nervios. No es posible que todo haya sucedido tan rápido.

Después de encontrarnos con todos esos vampiros de ojos terroríficos al salir de la casa Cullen, mi querido Nash me llevó corriendo tras él hacia el inmenso bosque en el cual estamos perdidos ahora. Uh espera ¿he dicho querido? Bueno, lo que sea.
El caso es que estamos él y yo solos. Porque los demás no fueron tan estúpidos, y no salieron pitando de la casa hacia la oscuridad del bosque.

—¿Y que se supone que haremos ahora Nash? Está anocheciendo y por estos lares no se ve ni un alma.

—Lo mejor será seguir caminando hacia el norte.Y así llegaremos a la carretera.
Sonríe.
—¡Y que tiene que ver el norte! Basta ya de tomarme el pelo eh.
Sonrío.
—En realidad, nada. Tan solo es para evitar seguir dando vueltas como locos por el mismo sitio. Tranquila, tu fíjate en la parte verde de los árboles que indican el norte.
Bajamos el ritmo al andar mientras me señala los diferentes hongos verdes que sobresalen de la corteza de los arboles.
Asiento atenta a su explicación y me imagino a Nash vestido de Scout. Qué imagen tan pintoresca oye.
No puedo evitar formularle la pregunta:
—¿En el distrito 13 existían los Boy scouts?
—¿Boy Scouts? —Arruga la nariz y las cejas. —Lo cierto es que no, definitivamente somos de mundos diferentes.

Al oír eso , se me forma un nudo en la garganta. El hecho de recordar que en cualquier momento puedo estar de vuelta en mi casa, y no volver a ver a Nash nunca más, me pone los pelos de punta.

—Hey Kris, ¿Te encuentras bien?
Me coge de la mano y paramos de caminar.
Me fijo en sus azules ojos, que brillan más con el reflejo de la luna llena que nos cubre esta noche.

—A decir verdad, tengo miedo.—Susurro.

Él, aprieta mi mano entrelazada con la suya y sonríe débilmente.

—Ya verás como encontramos pronto la carretera.

Me acerco más a él, tan solo dejando unos centímetros de distancia.

—No, no me refiero a eso. —Suelto un suspiro. —Tengo miedo de separarnos, de despertar en mi habitación y no... encontrarte a mi lado roncando como siempre. ¿Entiendes?

Ya está, ya se lo he soltado. Me considero una persona bastante complicada a la hora de confesar mis sentimientos.
Pero no hay tiempo que perder. Era ahora o nunca.

—Te entiendo mejor de lo que crees.

Cierra los ojos y acerca su rostro al mío, tanto, que puedo sentir su aliento rozando mis labios.

Y la atracción que estoy sintiendo por él en estos momentos es indescriptible.
Así que, por primera vez tomo la iniciativa y me acerco lentamente hasta sus labios. Y nos fundimos en un beso, pegados el uno al otro.
Nash me coge de la cintura y me acerca aún mas si es posible, y a su vez, yo le acaricio el pelo por la zona del cuello.
Dios mío perdóname por no haberlo hecho antes.
Sus labios son tan suaves y dulces que me pasaría toda la vida besándole. Sino fuera porque necesito oxigeno.
Y me separo para coger aire.
Pero Nash parece haberse quedado corto y repite la acción otra vez. Pero esta vez un poco más salvaje y no tan tierno.

Wow.

Y nos volvemos a separar.
Siento los labios hinchados y las mejillas coloradas.
Nash me mira a los ojos y en cambio yo bajo la vista al suelo. Qué vergüenza, no estoy acostumbrada a vivir los besos tan intensamente.

No decimos  nada, proseguimos caminando sin soltar nuestras manos .

Estoy hecha un manojo de nervios, ¿No se supone que tendría que haberme dicho algo cursi? En plan "Oh Kris eres el amor de mi vida"
Okay, puede que eso no, pero algún "te quiero" no estaría nada mal.

Pasados unos veinte minutos, logramos vislumbrar un coche aparcado en... ¡La carretera!

—Corre Kristen, corre.

Después de los increíbles besos que nos hemos dado. Eso es lo primero que suelta. Será posible.

Llegamos al asfalto y para nuestra sorpresa encontramos a Jacob junto a todos los demás.
No dudo ni in minuto y los abrazo a todos.
Se puede notar la alegría en el ambiente.
Hayes es el primero en hablar.
—¡Por fin os encontramos! Menudo susto nos llevamos hoy cuando os fuisteis al bosque. Pero nuestro amigo Jacob ha sido tan amable de llevarnos hasta vosotros.

Jacob sonríe marcando sus hoyuelos.
—Amable es mi segundo nombre. —Y guiña el ojo al afirmarlo.

—Ha habido un contratiempo con el libro. —Interviene el peliverde. —Resulta que me equivoque de saga y el libro no esta aquí escondido.

Maldito libro.
—¿Eso que quiere decir? —Tengo que preguntar.

—Que nos toca ir a otra saga a por él, antes de que la central general lo coja primero y se cargue a todos. En pocas palabras.

Uh que directo es el peliverde.

A saber cual lugar visitaré, ojalá sea Iléa de la saga de La Selección, o incluso Hogwarts de Harry Potter, sea cual sea debemos ir rápido.

Porque sino el fin del mundo fangirl y fanboy llegará pronto. Y no lo permitiré.

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⏰ Última actualización: Jan 07, 2016 ⏰

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