Enfermo~ [Wigetta]BL Fanfic

Diferencias~

Al salir de aquella prisión, el primer movimiento por parte de ambos fue buscar un método de escape, la primera idea que cruzo por la mente del más joven fue salir de ahí en algún auto estacionado cerca; Samuel se negó a tomar alguna patrulla por temor a ser descubierto de una manera tan estúpida como esa.

Buscaron algo discreto, sin embargo las armas y casquillos que pudieron tomar antes de salir por competo de aquella institución fueron las suficientes para llenar un par de mochilas con una buena dotación de municiones y una que otra arma de corto alcance... las favoritas de Samuel siempre fueron las escopetas.

El trayecto hacia la "libertad" fue más incómodo que el mismo hecho de llevar un par de cuerpos en la zona trasera de aquella pequeña camioneta de carga que habían tomado "prestada", el silencio sin embargo siempre fue la carta de presentación para el líder quien de cierta forma disfrutaba el no escuchar nada más que el motor y su propia respiración mientras miraba el camino de asfalto sobre aquella carretera tan poco transitada.

Se habían dirigido por una desviación hasta las afueras de la ciudad, muy cercanas a una reserva nacional, un bosque teñido en colores naranjas y amarillos debido al invierno que estaba a punto de llegar.

-Estas más callado de lo normal, la mayoría del rato siempre chillas y murmuras miles de cosas...- señalo Samuel, mirando a su acompañante quien solo se encontraba mirando por la ventana, perdido entre sus pensamientos y todas esas hojas que parecían caer tan lentamente.

-Estoy bien, supongo ¿A dónde nos dirigimos ahora?- respondió, mirándolo de vuelta sin mostrar alguna emoción, no era como si su compañero fuese a molestarse, de hecho se veía mucho más tranquilo que de costumbre.

-Conseguí un lugar para quedarnos mientras planeamos nuestro regreso.- incluso su solo perfil era tan extrañamente perfecto para él, aquellos ojos negros y profundos hundidos en el camino, esas facciones masculinas que destacaban tan bien acompañadas con esa barba y el hecho de que estuviera aun manchado con algo de sangre, era extraño, era anormal y pavoroso... era el amor de su vida.

-¿Nuestro regreso?- la duda quedo en aquellas palabras, es que acaso él pensaba en volver, así como así. Pero si apenas habían terminado de salir de la última vez.

-¿Tú te crees que yo me voy a quedar de brazos cruzados después de que aquellos imbéciles me encerraron todo este tiempo ahí?- su respuesta fue sencilla, seca y sin emoción alguna en su rostro, hablaba de venganza como si fuera lo más normal del mundo; Pero bueno, Guillermo había tenido tiempo para acostumbrarse, solo que ahora por alguna razón para él parecía tan... extraño.

-Voy a hacer que deseen nunca haberse siquiera topado conmigo...- esta vez grito, de la nada y como si mil y un demonios estuvieran almacenados dentro de su cuerpo a veces podía ser bastante bipolar.

-Ah, sí sobre eso... Samuel, quería decirte algo sobre...- titubeo un poco antes de proseguir con su idea, tampoco tenía intenciones de hacer enojar a Samuel, no por ahora.

-Bueno, yo pensé que tal vez podríamos dirigirnos hacia otro lado, ya sabes comenzar en otro lado y...- el chirrido del freno siendo pisado en seco acompañado con el golpe de su rostro sobre la guantera le silencio.

-¿Qué carajos te pasa ahora en la cabeza?- apenas y levanto su rostro adolorido para mirarlo a la cara este lo confronto con esos ojos feroces.- Haz algo de utilidad y recarga esas armas, será un largo camino y comienza a agradarme que dejes de parlotear tanto.- dio una señal para que pasara a la parte de atrás.

-Vale...- derrotado, con el pómulo inflamado y con la mirada hacia el suelo como un perro castigado, solo pudo obedecer, dirigiéndose a la parte trasera donde se encontraba su pequeño almacén, además de aquel par de invitados, aun bañados en su propio rojo sobre las bolsas de municiones.