Enfermo~ [Wigetta]BL Fanfic

Importancia~

POV'S Guillermo~

Ni siquiera mire atrás después de que mis pies me sacaran de aquel pútrido lugar y escondite, hice lo posible para cubrir mis huellas y huir de ahí hasta donde mis pies me lo permitieron.

Corrí durante varias horas, sin mirar otro lado que no fuese la carretera y el camino entero frente a mí, sabía que había huido, que era libre y estaba lejos de él, pero aun así mi cuerpo, había una sensación dentro de mí que me hacía sentir que aún se encontraba mirándome, era como sentir su mirada a cada paso que daba.

Tuvieron que pasar por lo menos unos treinta kilómetros para que mis nervios bajaran un poco y pudiese llegar a las afueras de una ciudad.

-Disculpe, sabe dónde está...- persona tras persona, ni siquiera me miraban cuando les hablaba y los que lo hacían simplemente dirigían ese odio directo hasta mí.

¿Es que están demasiado ocupados en su vida que no pueden ni responder la pregunta de un chico que está perdido?

De ahí para allá caminando sin siquiera mirar a donde iban o por donde pisaban, con la cabeza sumergida en esos teléfonos, demasiado ocupados como para siquiera darse un minuto para respirar algo que no fuera su propio aliento.

Si no fuera porque prometí no hacerlo de nuevo ahora mismo les metería una bala a todos, aunque si hiciera eso tal vez me atraparían... tal vez debería colocar una bomba a la mitad de la calle y solo correr.

-Um, disculpe podría...- había olvidado lo extraño que era sentirse menos que los demás, y solo con un par de acciones, la indiferencia y frialdad. Si lo pensaba bien no era muy diferente a como Samuel se comporta, me atrevo a decir que incluso en prisión las personas parecían mucho más humanas.

-Ahora recuerdo porque odio las ciudades...- aspire hondo, alejándome de la multitud, abriéndome camino entre las personas casi a empujones hasta que logre hacerme dentro de una calle donde por lo menos pude mirar el suelo.

Aquella ciudad era mucho más grande de lo que pensé, pase toda la noche y mitad de la mañana caminando sin dirección hasta llegar a este sitio a la mitad de la nada.

El vecindario parecía tranquilo, la gente iba por ahí con bolsas de compras, el olor a grutas y carne invadió mi nariz provocando que mi estómago rugiera, tengo que conseguir algo de comer.

-Eso podría funcionar.- un pequeño anuncio a las afueras de aquel pequeño establecimiento llamo mi atención, al parecer solicitaban ayuda para el lugar y un poco de dinero me vendría bien, algo que me dé un boleto de partida a un lugar alejado de todo.

Era un MiniMarket, se veía mucho más grande por dentro de lo que supuse, pero extrañamente estaba vacío. Solo un chico detrás de un aparador, sentado en la cima de una escalera, ojos y cabello oscuros y una piel clara, parecía perdido en sus pensamientos mientras se encontraba limpiando las latas que había sobre este.

-Hey, hola ¿está el jefe?- se giró de inmediato algo sorprendido, tiene una extraña aura inocente y caballerosa aun para su edad no debe ser un chico muy problemático, no para mí.

-No, y no creo que vuelva en un buen rato pero aquí estoy yo, ¿En qué puedo ayudarte?- hizo a un lado las cosas, bajando de un salto de aquella repisa solo para mirarme con una sonrisa amable.

-Vi que necesitaban a alguien.- parece buena gente, su cuerpo grande y sus brazos fuertes combinados con ese rostro inocente y tranquilo. Este chico era demasiado joven como para ser un jefe.

-Si el cartel, nos hace falta un carnicero ¿tienes experiencia cortando carne?- pregunto, guiándome hasta la entrada justo a un lado de las registradoras.