21.- Una mañana inusual.

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Bien.

Jimin estaba en la escuela, los padres de Jimin estaban en el trabajo esa mañana, ademas de que nadie más residía en la espaciosa casa, entonces...Si, estaba completamente solo.

Era de día y tenía mucho tiempo de ocio que llenar.

¿Estudiar? ¿Universidad? ¿Tareas? ¿Limpieza? ¿Trabajo? ¿Qué era eso cuando tenías la casa sola, eh? YoonGi pensó .

Y pues, no creyó conveniente volver el lugar en un chiquero y convertirlo en puticlub por un día, ni nada de esas cosas como acostumbraba hacer en su departamento cerca a la universidad en donde ejercía la carrera de derecho.

Puta carrera. Benditos sus padres por habérsela impuesto sobre el estante de su futuro. El no quería, él quería ser cantante.

En fin, era casa ajena, y la casa ajena se respetaba, es mas, tampoco es como si su silla se ruedas le permitiera todo aquello. Su estado no era el mejor de todos.

Un sonido estridente irrumpió los conflictos internos de su cabecita loca, corrió a atender la puerta a como su silla manual de ruedas se lo permitió.

Impulsándose, impulsándose, impulsándose hasta llegar al destino.

Cuando abrió la puerta, sus ojos tambien lo hicieron repletos de conmoción y gruñó con desagrado por dentro.

*

TaeHyung recibió una cachetada mental esa mañana. No se explicaba como podría ser tan sin vergüenza al haber besado a Jimin frente de JungKook.

Era todo un estúpido, un idiota, un canalla, un ... un cabrón... Y lo mas genial es que el lo sabía, y vaya que si. ¡Salud por ello!

Llevó su vaso de cerveza a la boca y se lo bebió de un solo sorbo, nisiquiera el sonido de su celular pudo con su pequeña celebración de esa tranquila mañana. Podía ser BaekHyun quien le llamaba de nuevo para pedirle explicaciones del porqué ya no quería saber más de él, se lo había dejado claro.

Querido BaekHyun, te juro que te tomé cariño en los pocos días que nos conocemos pero...ya me aburristes así que... Jodete. La única razón es que me he vuelto hetero y ya no se me para contigo. Bye. Ah, y no me busques.

Con amor, TaeHyung.

Definitivamente había tratado de ser lo bastante sútil en aquel mensaje de texto. En serio que si.

Cuando menos lo esperó, un último sonido del celular le sacó del sosiego en el que se encontraba, esta vez resoplando lo cogió de su bolsillo. Grande fue su sopresa al ver que no se trataba del exasperante BaekHyun.

De nuevo, mensaje de número desconocido que decía :

Te vi esta mañana. No me gustó lo que hiciste, probablemente te vaya mal si sigues con tu jueguito.

Se sintió como irritado.

Era el segundo mensaje ese día, y no le molaba para nada, pues a como descubriese de quien se trataba le iba a volar los dientes. No porque lo amenazara, sino por aguafiestas. Ese mugroso se las vería con él tarde o temprano, por lo cuál, no tardó ni medio minuto en contestar el mensaje.

My bad brother 《VKook》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora