My bad brother 《VKook》

Primer Extra 👀

"Todo quedaría entre nosotros".

-¿Te digo algo?- TaeHyung se acercó con cuidado hacía el pequeño JungKook, lo envolvió entre sus brazos y habló a su oído con suavidad-. Nunca le digas a nadie que me gustas.

JungKook se dio media vuelta en la cama y se encontró con su hermanito sonriéndole. El también lo hizo. TaeHyung se aproximó y le robó un beso en la mejilla.

-Te quiero JungKook.

-Y yo a ti Tae.

Esa oración.

Jungkook no entendía el significado de gustar, o talvez si lo hacía pero no del todo.

Ambos tirados en la cama del menor, con las piyamas puestas y los brazos entrelazados, mirando el techo y la luna brillar tras la ventana.

Ya llevaban casi un mes y medio de conocerse y las cosas entre ellos iban de bien a muchísimo mejor. Casi como nuevos mejores amigos Jungkook seguía a un hiperactivo TaeHyung por todas partes. Los adultos no hacían más que atinar a sonreir ante la ternura de los dos pequeños de la casa. El como TaeHyung saltaba y corría sin parar y Jungkook tras él intentaba seguirle el paso y tropezaba en el intento, luego TaeHyung volvería hacia su torpe hermano y lo ayudaría a levantarse para tomarlo de la mano y seguir sus camino, juntos, y claro, con Boni el peluche de Kook como cómplice.

Los dos niños tan unidos e inseparables.

El señor Kim aún no cabía en la idea de que ese era su hijo TaeHyung, sonriendo tan placidamente, incluso cuando su madre había fallecido hace mucho, Taehyung no había demostrado ningún signo se felicidad, siempre era esa fija mirada hacia el suelo y una tensión a su alrededor por completo aterradora.

Ahora era...con simplicidad...increíble.

Aunque aún había instantes en las que Taehyung era difícil de tratar, se enfadaba muy pocas veces pero cuando lo hacía nadie sería capaz de tranquilizarlo de sus rabietas, excepto Jungkook.

Iban juntos a algún lugar privado, y solos se encerraban en el.

-Ahora sí, Boni podrá consolarte- Decía JungKook cada que Tae habría de estar enojado, triste, de cualquier modo negativo.

Los dos eran como más que hermanos, eran...algo difícil de entender en ese entonces. Y ahora que Jungkook escuchaba a TaeHyung decir que le gustaba pues entendía menos.

-Hyung...-Dijo al par de minutos, en el silencio de una noche estrellada-. ¿Cómo así te gusto?

TaeHyung suspiró semi dormido y con sus manitas alcanzó uno de los botones de las camisa de Jungkook, empezando a juguetear con este.

-Uhm... Kookie, ¿Tú qué crees?

-Pues...yo no sé...

-Cóncentrate. ¿Qué sientes cuando te digo que me gustas? -Esta vez la atención del mayor estaba por completo sobre la de su hermano.

Jungkook intentó pensar con mucha fuerza.

-Me gustas, mucho.

Y Jungkook de repente se sonrojó, esperando a no seguir sintiendo más calentura en sus mejillas.

-Me siento...muy bien, especial. Es muy lindo Hyung, lo que siento, es lindo.