Un día me acerqué a mi mamá, tuve el valor de decirle que no quería continuar en mi colegio actual. De un momento a otro, me pregunto por qué, no supe responder a eso, fue difícil de decir, es más, ni le conté. Así que me matriculo en otro colegio parecido al que estaba. Me dijo que en dos semanas ya entraría al colegio y trate de sonreír en ese momento.No dormí nada esa noche, daba vueltas en la cama, oía las voces de mis compañeros diciéndome esto: Eres una desgraciada cobarde, eres débil, ja!...crees que huyendo de nosotros, te vas a salvar del bullying...no vas a poder escapar! Nunca...!
Cada vez oía sus voces mas fuerte, me dio un odioso dolor de cabeza, no pude contener ese dolor por mucho tiempo, al levantarme de la cama, comencé a ver todo borroso, intente dar un paso, pero, me desmayé....Al parecer nadie en mi casa se dio cuenta que me desmayé, de hecho desperté en el suelo. No seguí escuchando las voces de mis compañeros diciéndome esas terribles cosas, de hecho me hice la enferma para no asistir más a ese colegio.
Ese día, me pregunto mi mamá, repentinamente, por qué había decidido cambiar de colegio, aún no sabía que contestar...de hecho no encontraba las palabras exactas para decir lo sucedido en el colegio, de repente, creí haber visto una tristeza en la mirada de mi mamá, pensé en que ella tal vez comprendería el por qué al cambio de colegio, pero al final no le dije nada...entonces ese tema se quedó atrás. Después me puse a pensar en lo que sucedería esa noche, ¿volvería a escuchar esas voces? ¿Tal vez el cambio de colegio sería bueno? ¿Empezaría un nuevo capítulo e intentar olvidar lo que sucedió con ellos?. Diversas preguntas invadían mi cabeza.
Sin darme cuenta, llegó la noche, estaba acostada, mirando al techo y pensando lo diferente que sería mi vida al hacer ese cambio, pero también en el miedo que sentía, podría volver y no sabría qué hacer...
Al fin llego mi primer día en mi nuevo colegio, muchas personas me dieron la bienvenida, una señora se me acercó y me dijo:-"Estas lista para tu primer día?. Ven te mostraré tu nuevo salón y a tus compañeros".
Estaba nerviosa, el miedo me consumía lentamente, fue un largo camino para llegar a mi nuevo salón...al llegar a él, mis pasos cada vez más se hacían más lentos...pensaba si mis compañeros son amables o serían amables conmigo...De repente, la señora se detuvo y me dijo:-"Aquí es....oye sé que estás muy nerviosa por tu primer día en este colegio...pero tienes que aprender...que en la vida una puerta se cierra, mientras que otra se abre..."
Y así fue...ella tomó la perilla de la puerta y lentamente, fue abriéndola....
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Without A Happy Ending
No FicciónNo todas las historias tienen un final feliz, existen historias con diferentes finales, algunos de ellos suelen ser tristes...no todos los principios comienzan bien... Toda historia tiene que contarse