Welcome | L.P ♡ (Suspenso)

7

Después de comer sólo un pedazo de esa asquerosa cabeza de no se que animal, fui directo a mi cama, estaba pensando en que será lo que me dirá para hacer el brujo.

Pasaban las horas y yo nuevamente no podía dormir.

Ya era sábado, estaba tratando de cerrar mis ojos pero simplemente no podía, no tenía nada en que pensar pero igual no podía dormir.

Revisé mi celular, eran las seis de la mañana, el sol recién estaba saliendo, me resigné a levantarme y fui al baño, donde descubrí que tenía unas ojeras enormes.

Me lavé la cara y me puse algo de maquillaje para tapar las ojeras y fui a la cocina y buscar algo de comer.

Lo único que encontré fue una nota encima de la mesa, "No salgas hasta que vengan por ti".

Me entró un escalofrío, puse leche en un vaso y me senté a esperar. Estaba quedándome dormida, hasta que escuché que alguien tocó la puerta.

Me levanté rápidamente y la abrí, encontrandome al duende, entró en mi casa sin decir nada y me sólo dió un aplauso que hizo que en menos de un segundo estemos en la casa del brujo.

—Vaya, vaya, querida Cloe, viniste rápido.

—¡Este raro duende me trajo!

—Lo sé, yo lo mande.

—¡Estas loco!

—Baja ese tonito, querida Cloe, ven conmigo a mi oficina.

Seguí al brujo hasta su oficina, el pasillo por el que me llevó tenía las paredes llenas de telarañas, era asqueroso.

Al llegar a la puerta, estaban como unos "guardias" el vampiro y el zombie, tenía miedo de el último, cuando lo conocí quería mi cerebro.

Miré atentamente a los raros seres y entré con el brujo en frente mío. Por estar vigilando al zombie, no me fijé que el hombre lobo estaba dentro, y me tropecé con el.

Me miró mal y luego salió de la oficina porque el brujo se lo pidió.

Me senté y empecé a inspeccionar la oficina, había muchas calaveras colgadas y algunas telarañas, pero una libreta con algunas manchas de sangre me llamaron la atención.

Me recordaban a algo.

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- Yani.