Capítulo 11: Melany y su amor secreto hacia mi hermano.

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-¿Te gusta mi hermano?
-¿Qué? ¿Porque preguntas eso?- Melany estaba totalmente roja.
-Es simple curiosidad.- mentí. Cuando dijo el nombre de mi hermano se le iluminó el rostro.
-No, no, no. Claro que no me gusta tu hermano. Cuando va por el instituto ni siquiera me mira, no creo que sepa que existo.- contestó rápidamente.
-Pues amiga mia, dejame decirte que si mi hermano no se fija en ti es por que es un completo idiota.- Lo decía de verdad, Melany era guapa, pero mi hermano solo se fija en si sirve para una noche.
-¿Quieres venir a mi casa?- Tenía que conseguir que mi hermano supiera que Melany existe.
-¿Estará tu hermano?- Preguntó.
-Y ¿que más da si esta?- La iba a convencer si o si.
Sonreí con malicia y dije:
-Vamos Melany, se que quieres venir.- Se me dan bien los retos, y este no iba a ser la excepción.
-Voy a ir contigo, pero no por lo que tu crees.- ¿Ahora se muestra tímida?
-Si, si. Lo que tu digas.- Sonreí con suficiencia.

Carlos

Juan y yo estábamos hablando de coches y otras cosas triviales cuando de repente la puerta principal se abrió y apareció Sara con una chica por detrás de ella.
Era guapa, tenía los ojos de color azul y el pelo rosa.
Si estaba bien, espera, espera, retrocedamos, ¿el pelo rosa? Pero ¿Que coño? Bueno, bueno le queda bien, había visto colores peores.
-Hola.- dijo Sara secamente.
No me molesté en contestar, nunca me había gustado esta chica, puede que me atraiga algo de ella, pero no es nada que una noche loca no pueda solucionar.
Juan sonrió a su hermana y le hizo un gesto con la cabeza en forma de saludo, pero a la chica chicle nada de nada.
-Hermanita, papá volverá en tres días del viaje.- dijo Juan sin darle importancia.
-Vale.- Sara tampoco le dio mucha importancia.
Cuando por fin iba a subir las escaleras para irse frenó en seco y se giró con una sonrisa maliciosa.
-Oh, Juan. Ella es Melany, una amiga mía.- dijo sin que la sonrisa abandonara su cara.
Mientras Melany estaba como un tomate.
Juan la miró y sonrió, se lo que estaba pensando, pero Di hermana no le dejaría hacerlo.
-Hola peque.- Juan se levantó del sofá y le plantó dos besos a la chica, lo que produjo que se pusiera mas colorada aún.
Esto empezaba a ser gracioso.
- Ho-hola.- susurró la tal Melany.
-Y a mí ¿no vas a presentarme?- Melany se giró y me miró, le guiñe un ojo y los colores volvían a su cara.
Sara me miró mal, como había hecho durante todo el día.
-Oh si, claro.- sonrió falsamente.- Este es un idiota llamado Carlos.
-Encantada.- logró decir Melany. Volví a guiñarle el ojo y esta vez me sonrió ampliamente.
Sara se dirigió a la cocina con Melany detrás de ella y a los cinco minutos salieron con todo tipo de comida, desde fruta hasta dulce.
-¿Os vais a hibernar en tu habitación?- sonreí con suficiencia.
Recibí una mala mirada por parte de Sara y me enseñó el dedo corazón.
-De verdad, que mala educación tienes.- Grité sarcasticamente para que Sara me oyera.

amor fuerza y odio (Pausada temporalmente) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora