Capítulo 8

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Ya era hora de regresar a casa , eran las 5 de la mañana estaba todo oscuro.
Estaba muy oscuro, y había demasiado frío. Si mi madre me veía llegar sola me mataba.
No sabia que hacer , hasta que se me ocurrió llamar a Eduardo , no quería molestarlo pero necesitaba su ayuda.
Eduardo estaba durmiendo, hasta que contesto mi llamada.
-¿Hola?.-pregunto.
-Lamento hablar a estas horas. Lo que pasa es que Antonio me dejo ¿podrías pasar a recogerme?.-dije aterrorizada.
Si decía que no estaba muerta, me lo merecía , no lo había tratado del todo bien.
-No... Nolose mi madre esta dormida.-respondio.
-Bien.-respondí.
-Iré por ti.-Dijo.
Erika estaba platicando estaba mas animada que un payaso en plena fiesta.

Mi 11:11.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora