Mi amada Alisia: Vampiros de Aleigans (Volumen 1) #WattysEs2016

Capítulo 3

<Alisia POV>

Luego de esa noche que mi jefe apareció de improvisto.

Estaba sentada escribiendo cosas para la campaña que William decidió hacer. Cada persona de ese gran día por una inauguración de Miel de Campo.

Estaba a las corridas al igual que la secretaria de William. Cuando ella se me acerca con cara de cansancio.

<Que mal se ve por dios> Era lo único que pensé cuando la vi.

- Disculpa Alisia no tienes un marcador -Dijo Diana sonrojada-.

Hacia mas o menos 40 grado de calor en el campo en donde será la gran festividad.

<Quiero andar en ropa interior si es posible. Que calor insoportable >

- Claro Diana- Decía mientras le extendía el marcador a ella-.

- Gracias Alisia estoy algo cansada pero no quiero decepcionar al señor Carter- Decía ella secando el sudor de su frente y corre hacía donde Ian le gritaba que venga-.

Cuando la vi irse solo sonrio sabiendo lo tan leales y responsables son los empleados de mi jefe.

Mientras me daba vuelta caminaba hacia el ascensor se me acerca Roger unos de los empleados de William.

- Hola preciosa - Sabía a quien se dirigía y me doy vuelta mirándolo-.

- Hola Roger ¿Ya está listo las mesas y adornos florales? -Preguntaba riendo-.

- Claro ya está listo-Decía algo cansado y se va de allí-.

Sabía que el tenía ya novia y no quería problemas con ella.

<Era mejor evitarlo >

Ya estaba lista para caminar al lado de William y decir que todo lo que mandó a ordenar ya estaba listo.

Se veía muy apuesto para la ocasión. Una camisa de seda negra, corbata roja, y chaleco gris con unos pantalones de vestir gris. Estaba de lujo.

- Ve rápido a darte una ducha en el hospedaje - Me decía William y yo sólo asenti y salí de allí casi volando-.

<William POV>

Al realizar todo mi trabajo y bajar de mi oficina bien presentable, siento a Alisia a mi lado diciendo que todo estaba listo y la mande a darse una ducha. Ella gustosa acepto.
Luego de verla como corría entre la gente siente entre mis fosas nasales ese olor a putrefacción.

Al darme vuelta vi como un hombre de negro, piel pálida, ojos verdes y cabello rubio bien peinado para atrás acercarse a mi con elegancia acompañada de una mujer que por su cuerpo decía que era una prostituta del inframundo.

Al verlos varios de mis hombres rápido se les acercan para preguntar quienes éran.

Esto me traía mala espinas. Sólo sentía como mi sangre hervia.Conocía a ese sujeto.

Era mi maldito padre adoptivo.

- Déjelo pasar - Les digo a mis hombres y ellos lo dejan-.

- Te diré una sola cosa hijo -Decía el sonriendo-. Enseñale modales a tus amigos.

Me acerqué a él y lo tome del brazo sacándolo de allí con su perra.

Al llegar afuera sólo lo miraba furioso y mis ojos se hacían dorados intensos.

- Nunca te atreves a aparecer así como así padre - Estaba cansado y molesto por lo que estaba haciendo-. Hay muchísimos humanos aquí para que hagas idioteces...

Este sólo ríe mirándome y camina de ambos lados con sus ojos rojos mientras la muchacha se sentaba cerca de mi provocando más irá.

- Ya basta vete a casa y hay hablaremos padre - Decía algo molesto y este para en seco frente a mi y sonríe-.

- Cómo mandes hijo - Decía mientras se inclinaba y la perra de el se reía y ambos se iban lentamente y este toca el trasero de la otra y yo sólo miro hacia otro lado-.

Porquería de padre... pensaba...

<Alisia POV>

Estaba alistandome rápido junto a Diana. Nos maquillamos rápido y nos miramos al espejo y salimos de prisa de allí.

Mi vestido era verde color metal con adornos negros y un peinado clásico de esta época.

Diana iba vestida de color rosado con encajes negros también y sonreíamos al captar varias miradas.

Yo buscaba a William pero no estaba y sólo voy a la sala de conferencia y todos estaban allí empezando la reunión.

Todo iba bien perfecto. Me encantaba todo como quedó. Muchas personas miraban nuestros productos y decidieron apoyar nuestra marca y fabricación de la Miel de Campo para las personas.

La noche era larga y algunas que otras estrellas brillaban. Decidí salir con William en el balcón. Luego de oír varios halagos de el y de varios más.

Caminábamos lentamente y paramos mirando la luna y brindamos.

- Por nuestro proyecto que vamos por día a día construyendo - Decía sonriendo y choca las copas-. ¡Salud!

- Salud -Sólo lo miraba sonriendo y la luna iluminaba todo nuestro sendero de esa noche-