Primer beso

96 6 0
                                    

Al fin ha llegado el día que tanto esperaba, hoy pasaré por lo de Abby, no aguanto más las ganas que tengo de verla. Termino mi trabajo y salgo disparado hacia su casa, golpeo y unos instantes después ella abre. Está bellisima, lleva un short, al parecer es una de las prendas en la que se siente más cómoda. Tiene una camiseta un poco ajustada lo que deja apreciar su lindo cuerpo y el cabello le cae sobre los hombros, alborotados como siempre. Trato de disimular mi cara y reprimo mis impulsos por abrazarla y probar los labios hermosos que tanto me están llamando. Me acerco y de una forma un poco descarada y le vuelvo a posar un beso en la comisura de sus labios, creo que esto se me está haciendo un hábito, para mi sorpresa ella no presenta ninguna queja. Aspiro rápidamente su aroma y la dejo grabada en mis sentidos. Ella me mira con esos ojos penetrantes y me invita a pasar.

Me da un pequeño recorrido por la casa mientras me cuenta que tiene un mes aproximadamente para tenerla finalizada. Le paso el presupuesto y la lista de los materiales que necesita. A partir de ahora nos veremos todos los días, pensamiento que me pone muy feliz.

Luego de varios días me encuentro pintando la casa de Abby, ella va de un lado a otro mientras acomoda un par de chucherías. No logro concentrarme en mi trabajo viéndola pasar a cada rato cerca de mi.

-Mierda, si sigo así no voy a terminar nunca mi trabajo. Acaso no se da cuenta lo hermosa que está hoy?- La estela de su embriagador perfume solo hace que me distraiga aún más. Isaac concéntrate, me digo, me doy otro reto mental y mientras trato de concentrarme siento un escalofrío que recorre mi cuerpo, me giro y ella está ahí parada con un vaso de jugo y un plato de galletas.

-Te he traído un poco de jugo, no estaba segura si tenías sed-, me dice un poco tímida. Nuevamente noto un rubor que se va apoderando de sus mejillas, lo que le da un toque dulce y sensual a su rostro.

-Sí, gracias- le digo mientras tomo un trago y la sigo mirando por encima del vaso.-Las galletas más tarde, gracias- da media vuelta y se va hacia la cocina, deja las galletas allí por lo que vuelve sin nada en las manos.

Tiene una mirada expectante, fuerte, penetrante y yo no se cuanto más voy a soportar esta distancia que nos separa. Nuestras miradas están clavadas una en la otra. El silencio se vuelve ensordecedor, el aire más denso, dejo el vaso en el suelo y me levanto para verla. Noto que su respiración está cambiando, la mía también, esto se esta poniendo insoportable.

Me acerco lentamente hasta quedar a centímetros de ella. Por acto reflejo se humedece los labio, llevo mi cara aún más cerca de la suya, esperando un reproche, algo que me haga dar un paso atrás y nada, es señal que me está dando permiso para seguir avanzando.

-Abby, desde el primer día que te vi estoy deseando hacer esto- le digo y una leve sonrisa de costado se dibuja en su rostro. Listo no puedo más.

No dejo pasar un segundo más que poso mis labios sobre los suyos. Son suaves, dulces, saben al mismísimo cielo. Por instinto paso mi mano sobre su cuello y lo llevo hasta su cabeza donde noto la suavidad de su cabello alborotado. Con la otra mano la tomo de la cintura y la acerco contra mí. Ella responde a todos mis besos y movimientos. Levanta sus dos manos y las enreda en mi cabello, tirando de él mientras se pega más a mí. Me está demostrando de esta manera que también lo está disfrutando tanto como yo.

La beso en forma más intensa y abro la boca invitándola a entrar, a explorar. Lo acepta. Esta mujer despierta todo tipo de sensaciones en mi cuerpo. La deseo tanto, pero ahora no, se muy bien que no es el momento. Decido separarme de ella cortando por un instante el clímax, nuestras respiraciones están muy agitadas casi nos resulta imposible poder hacerlo. Me mira con esos hermosos ojos intrigantes y la vuelvo a besar. No tengo idea como lograré cortar con todo esto, primero porque no puedo y segundo porque no quiero. Corto nuevamente el beso.

-Abby soñé con esto durante noches enteras, no creas que estoy jugando contigo. Desde que te vi regañandome en el paredón mi corazón ha quedado hechizado con tu belleza- le digo para que vea que lo mío es en serio .

-Yo también sentí lo mismo al verte ese día- me dice y la vuelvo a besar. No quiero dejarla ir nunca más, me cuesta separarme, me atrae como un imán.

-Esto depende de tí Abby, yo respetaré lo que decidas. Te animas a seguir con esto?- le digo y por dentro rezo a todos los santos para que su respuesta sea un sí. Me mira con esos ojos hermosos mientras la tengo tomada de la cintura sujetándola contra mi cuerpo, no quiero que se vaya de mi lado.

-Sí, quiero que probemos- contesta y mi corazón estalla de alegría. La vuelvo a besar con más ganas que antes y ella como hasta ahora responde de la misma manera.

-Será como tu digas entonces mi princesa- la abrazo, pierdo mi cara dentro de su pelo y me dejo embriagar por ese bello aroma a hierbas y limón. La beso nuevamente y con todo el dolor del alma me separo de ella y vuelvo a retomar el trabajo. Tengo una sonrisa pintada en la cara y no se me va, creo que por primera vez puedo decir que me siento completamente feliz.


Espero que lo estén disfrutando. En los próximos días estaré actualizando los capítulos siguientes. Besos para todos!!! 

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Nov 01, 2015 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Corazones compatiblesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora