¡Hey, mejor amiga!

Capítulo final

Joshua

El jueves me tocaba jugar un partido muy importante de baloncesto. Estaba muy nervioso y feliz a la vez. Sabía que ibas a estar en las gradas apoyándome como siempre, así fue. Cuando el partido acabó todos empezaron a gritar. Habíamos ganado, estaba muy feliz, recuerdo a mi madre acercarse a mí para decirme que el sábado muy temprano nos mudaríamos ya que papá había conseguido un mejor trabajo en otro estado del país. Estaba molesto, pero me dolió mucho más como tomaste la noticia. Comenzaste a llorar diciéndome entre lágrimas que no podía irme porque tu me necesitas contigo ya que era tu mejor amigo. Te juro Rachelle que estaba aguantando con todas mis fuerzas no lanzarme a llorar porque sabía que no iba ayudar en nada. Hablé contigo y llegamos a un acuerdo, el viernes estaríamos los dos juntos todo el día. Debo admitir que fue muy divertido. Pronto el sábado llegó y con él también el recuerdo de que debía irme. 

Recogí mis maletas, las tiré en la baúl, antes de entrar en el coche y desaparecer, te escribí una última carta. Espero que la encuentres. La metí en el correo como si fuese una postal. Luego de eso me entré en el coche, arrancó a toda velocidad. Miré una última vez por la ventana del coche nuestras casas, miles de recuerdos me invadieron. Nosotros jugando en el patio, corriendo bicicleta por la acera y un montón más antes de que perdiera de vista nuestras casas.

Te extraño Rachelle. Mi mejor amiga, mi hermanita, mi primer amor. Juro que lo hago, solo espero que algún día volvamos a encontrarnos. Eso es lo único que todavía puedo seguir pensando. Te mantendré al tanto de todo, lo prometo Rach. Te amo, mejor amiga.