El espejo

Prologue

- Me siento increíblemente estafada.

- Te dije que podría no funcionarㅡ Me dijo mi amiga al otro lado del la línea.

- Me dijiste que un tipo raro saldría del espejo y me ayudaría con mis problemas sentimentales.

- Tal vez sólo tengas que esperar un rato o algo.

- O tal vez te lo lance a la cabeza la próxima vez que te vea.

- Si no fueras tan agresiva y desesperada no necesitarias la ayuda de un espejo mágico.

- ¡Yo no soy agresiva! Y si tengo que escucharte una vez más-

- ¿Quieres callarte niña? Algunas personas queremos domir.

Mire a todas partes y no había nadie cerca de mi, ya sabía yo que no debía de beber esa cosa extraña en la mañana.

- Estoy aquí abajo, genioㅡ Baje la mirada hacia al espejo de mano y me encontré con unos ojos cafés, había un jodido tipo en el espejo. Y oh dios mío, estaba bastante bien.

- Oye...creo que te llamaré luego, adiós.

- ¿Qué? No te atrevas aㅡ Colgué.

- ¿Quién demonios eres tú?

- Will y estoy aquí para ayudarte con tu inexistente vida amorosa y bla bla bla...si me dieran una moneda por cada vez que tengo que repartirselo a una solterona, bueno, no importa.

- Estoy a punto de romperte en mil pedazos, maldita cosa.

- El caso es, cariño, que soy irrompible. Además de que no desaparecere de aquí hasta que conquistes al tipo que te gusta y sólo dios sabe cuando pasará eso.

- Maldita sea.