Idilíco

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Mis ojos grises tenían un llanto no manifestado que salía del fondo del fondo de mi alma, esto debió darme un poco de lección en lo que a mí se refiere, fue un error decirle a Américo que todo se mejoraría, que su madre se sanaría y no fue así; reconozco mi error pero eso no le justificaba haberme tratado de esa manera.

Las trenzas de mis zapatos estaban sueltas, tampoco me moleste en amarrarlas, sonará duro, pero no me importaba nada en lo absoluto la ruptura con Américo, comparada con la carta que recibí esta mañana, meditaba tranquilamente en cada una de las palabras que estaban escritas allí "Malditas mariposas, que me hacen caer en el abismo". Quizá tenía un significado que debía resolver inmediatamente, que por si fuera poco también me ayudaría en algunas situaciones que me están sucediendo.

La letra perfectamente moldeada sin poder explicarlo sentía que era muy conocida para mí y eso me daba pavor.

Estaba sentada en una banca practicando la mala costumbre de mover mis pies llenándolos de charcos sucios, mientras seguía haciendo el movimiento al unísono, se agrega al conjunto mis uñas adheridas a la espalda, sacando 7 plumas de ella, no las tenía incrustada en la piel, solo que estaban allí y tampoco me moleste en tenerlas.

- ¿Un alma sola y taciturna por las calles?

Simplemente el sonido de la voz me hizo dar un movimiento brusco a mis pies, llenando parte de las piernas del caballero.

- ¡Mark! -digo algo agitada-tremendo susto, el corazón se me va a salir de su lugar. ¿Qué estás haciendo?

-Depende de cómo lo preguntes o a que te refieras, en estos momentos observo a una bella dama.

Se sienta al lado de mí e ignoro el comentario

-Discúlpame, te ensucie el pantalón-Lo mire y dije con mucho énfasis- Yo me refiero a que te dedicas.

-Ya te dije estoy observando...

Se frunce mi seño y él ríe, Mark nunca cambia siempre haciéndome molestar.

-Dejé la música por los momentos, ahora tengo un local en el cual hago tatuajes, por lo que veo tú no tienes ninguno...

- ¿Debería tenerlo?

-Obviamente, los tatuajes son una marca eterna de un recuerdo idílico, acaso, ¿tú no tienes ninguno?

- ¿Recuerdo Idílico? Oh Mark, idílico es una palabra que creo que no puede describirse en mis memorias, supongo que debería pensar con exactitud que quiero dejar marcado eternamente en mi piel.

-Es bueno que lo pienses Ikap, es un buen argumento a decir verdad.

Pasó su mano por su cabello rubio y dijo:

- ¿Sabes? También ayudo a la gente a escoger lo que se podrían hacer

-Bueno, yo creo que podría escogerlo sola

-Como bien prefiera Excelencia

Suelto una carcajada

- ¿Excelencia? Hombre esos recuerdos idílicos te afectan el cerebro, esa palabra es como si se refiriese a un ser superior y yo no soy más que nadie.

-Okay Ikap, como bien gustes, ten llámame cuando quieras hacerte uno

-Claro que si

Ambos sonreímos él se levanta, cuando queda fuera de mi vista guardo en el bolsillo la tarjeta donde estaba su número telefónico y las plumas que previamente restaban en el puño de mi mano.

***

Tic-toc, Tic-toc, el constante sonido que hacia el reloj le acompañaba mi pie como acorde musical, la perfecta biblioteca seguía tan indispensable como siempre y las plumas yacían en el escritorio.

Pensé en el tatuaje que llevaría a cabo, pero no se me ocurría nada. Sin embargo, me decidí a dibujar lo que mi mente creara, y mi mente volara al compás que quisiera.

Sonó la puerta, no me sobresalte estaba atenta al sonido del reloj, de ella salen Emma y Samuel.

- ¿Dónde estabas?

-Se dice Hola Ikap, o algo parecido, farfullando amargadamente

-Pero te traje de tragar comida china, ¡ámame!

- ¡OH! Su excelsa alteza, mis reverencias a usted por permitir que sus pies se dirijan a buscarme algo para tragar.

-Y también te traje lentes de contactos.

-Espera un momento y me arrodillo solo espera que los las vacas pongan huevos.

-Ridícula, necesitas comer, porque estas muy maja

Emma se va a buscar comida, según ella estoy mal porque estoy sin comer Samuel toca mi brazo desnudo y me dice

-Ikap ¿Qué son estos rasguños? Demanda mi hermano

- ¿Abrace visto? Mi hermano menor ¿ exigiendo respuestas? - Farfullo

-Como quieras, igual papa no le gustara esto

- ¿Quieres cerrar la boca? Me caí eso es todo

- ¿Cómo?

- ¡A comer! Grita Emma desde la cocina

Vamos hacia donde ella esta, comemos en silencio y Emma me reservó el derecho de lavar trastes.

- ¿Qué paso con Américo? - Dice Emma

-No habla el mismo lenguaje del amor que yo

-Él te ama

-No es cierto

-Nena no digas eso, vamos levanta el animo

- ¿Cómo se come eso?

- ¡A cosquillas!

Emma desenfrenadamente no paraba de hacerme cosquillas, me había tirado en el suelo con tanta agonía, ella siempre tan cruel, me reía como una loca encabronada.

- ¡Para animal de monte!

-Vale está bien, pero si nos hacemos un tatuaje con Mark. ¿Nos vamos?

-Obvio que sí.

Agarre del escritorio el dibujo, y nos fuimos en pijamas, ¿Qué más daba? Iba por mi recuerdo Idílico, o si la página que cargaba podría llamarse de esa forma.



Ikap Sust y los cuervos hambrientos -Jahaziel Torres |#WOWAwardsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora