JUNTO A TI [MYUNGYEOL]

19. Jeju

Hoy no quería despertar, ni  ir al trabajo, sobre todo no quería pensar en lo imbécil que fui la noche pasada, sin embargo, tampoco quería perderlo de vista, así que resignado fui a trabajar. Al llegar me encontré con él y...ese tipo.

Parece que se le ha hecho costumbre ignorarme. Quise mantenerme ocupado y dejar de pensar en tonterías, pero no fue así, seguí cuestionando mi comportamiento hacia sungyeol. Este día no podía ser peor, o eso creí hasta que; recibimos una inesperada visita en nuestra agencia.

-¡Eonniee! ¡oppa! Los extrañe tanto -gritaba, nuestra pequeña pesadilla, colgándose de mi brazo y luego corrió a ahorcar a su hermana.

-Yein-ah..p-podrías soltarme -se quejó seung ah liberandose del agarre de la pequeña monstruo.

-Pero, eonnie...

-¡¿Tú porqué estas aquí?! ¡¿quién te ayudó a escapar?! -yein soltó una pequeña risa, luego puso su rostro serio. Ella estudia en un internado desde que comenzó la preparatoria y siempre logra escapar cuando quiere divertirse.

-Si, eonnie, estoy bien, pasaba por aquí a visitar a mi única hermana y primo. No, no necesito dinero. Gracias por preocuparte por mí -ironizo caminando hasta el sofá donde se dejó caer-. Estoy libre durante un mes.

Esas últimas palabras nos cayó como balde de agua fría.

-¡Un mes! -gritamos en unísono. Ambos nos miramos, sabíamos lo que eso significaba.

-¡Es tu turno! -declaró seung ah.

-Es tu hermana -dije en mi defensa.

-Tú eres su favorito.

-Tú..tú...eh...-tarde mucho en pensar, suspire sonoramente declarando mi derrota.

-¡Oh, si!  gané -gritó sacando su lengua de manera infantil.

Miré a yein y ella también celebraba la victoria de su hermana. Cuidar a esa niña es un problema, aunque tenga dieciocho años.

-oppa, no te veo feliz ¿acaso no quieres estar conmigo? -hizo un pequeño puchero que me pareció tierno. Tal vez pueda distraerme con ella.

-Claro que no...-extendí mis brazos y ella corrió a abrazarme, la apreté suavemente.

-Ews, me provocan náuseas...

-Envidiosa -murmuró yein, reímos por lo bajo, si no eung ah se pondría agresiva.

Escuché que la puerta se abrió dejando ver la figura alta y delgada de sungyeol, nos miramos y no evite sonreír. Estaba feliz de verlo aunque,  desvío su mirada a la persona con quien estaba abrazado.

-¿Interrumpo?

-¡Sungyeol oppa! -yein se soltó de mi agarre y corrió hasta sungyeol lanzándose sobre él. Los dos cayeron al piso quedando muy cerca el uno del otro y de cierta forma eso me molesto.