Capítulo 10: La caja inesperada

136 8 0
                                    

Pasó la mañana y yo quería aclarar las cosas con Thomas porque no le había dado explicaciones sobre mi comportamiento hacia el. Todos teníamos que ir de nuevo a otra reunión para aclarar lo que íbamos a hacer con las pruebas. Cuando Bella se despertó Rachel y yo comprobamos el estado de salud de ella para ver como se encontraba. Estaba como si nada hubiera pasado, solo con un poco de dolor en el cuerpo, pero yo me encontraba igual. Newt fue a recoger a Bella para acompañarnos para ir a la reunión, mientras íbamos le conté el cotilleo que se había perdido, porque le encantaban los cotilleos:

- ¿Sabes qué Rachel y Aris van a tener una cita?- le dije mientras le dirija una sonrisa sarcástica a Rachel

- ¿¡Qué!?- dijo Bella asustando a Newt

- Yo ya lo sabía, le estamos ayudando a programarla- nos contó

- Que pesados que sois, no es emocionéis, es una cita, tampoco es para tanto- decía Rachel

- Claro, claro- decíamos Newt y yo con sarcasmo

Llegamos y comenzamos la reunión:

- Chicos, debido a lo de ayer suspenderemos la prueba del hoyo, con lo cual mañana empezaremos las pruebas para corredores- informó Alby

- Alby, yo no voy a seguir participando, no creo que este preparada, y aparte no me encuentro en condiciones- confesó Bella y Newt le dijo:

- Has hecho bien, el laberinto es muy peligroso, prefiero que te quedes aquí- le dijo en voz baja

- De acuerdo ¿Y vosotros seguís?- decía Alby refiriéndose a Gally y a mi

- Sí- dijimos los dos a la vez y luego nos miramos desafiadamente

- Bien, pues doy por concluida esta reunión, os esperamos mañana en... aquí- dijo Alby y todo el mundo se retiró

Al salir de la cabaña de las reuniones oímos un ruido, me resultaba familiar, ¡Ya sé lo qué era! era la caja donde hace unas semanas estábamos encerradas las chicas y yo:

- ¡La caja chicos! ¡Pero aún no toca!- decían algunos chicos del claro acercándose corriendo a la caja para ver quien era el que subía esta vez.

Nosotras decidimos acompañar a todo el claro, ya no seríamos las únicas novatas aquí, esperaba que fueran chicas, para que fuéramos más. Thomas abrió la caja y... no era comida, ni una persona, era... ¡Un perro! Parecía muy atento, todos nos quedamos sorprendidos. El perro tenía el pelaje rizado y marrón, parecía estar siempre alerta:

- Perfecto, primero chicas que no sirven para nada, ahora un estorbo de perro, solo falta un dinosaurio parlanchín- dijo Gally

- Haber si el incordio vas a ser tu- le dije

Se enfado tanto que me dio un golpe en la cara tan sumamente fuerte que me tiró al interior de la caja y el perro salió de un salto. Me pegué un golpe en la cabeza con el suelo de la caja:

- ¡Eres imbécil o que te pasa!- le dijo Thomas

Empezaron a pegarse y Alby, Chuck y Minho aun lesionado les intentaron separar, lo consiguieron pero Chuck se llevó un man porrazo accidental de Thomas en toda la nariz. Newt me ayudó a levantarme, pero en ese momento se me vino algo a la mente, un nombre, Laia. En ese momento me di cuenta de algo, ¡Me acordaba de mi nombre! La alegría fue tanta que hasta se me olvidó el dolor del golpe:

- ¡Me acuerdo de mi nombre! ¡Me llamo Laia!- les dije

Me levanté de la caja y todo el claro me felicitó, el perro, no nos conocía pero parecía muy feliz con nuestra felicidad:

- ¡Gracias Gally!- le dije, con lo enfadado y furioso que estaba se fue pegándole golpes cada dos por tres al suelo.





Maze RunnerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora