Las semanas pasan muy rápidas. Al mediodía casi siempre almorzamos todos juntos en el trabajo incluso con Daniel almuerza con todos para reforzar el tema de la confianza junto al respeto. Es un hombre de carácter pero a la vez sabe escuchar, toma sugerencias y nuevas ideas con la mente abierta. No trata de imponerse, solo plantea su punto de vista y raramente se equivoca y cuando lo hace es capaz de aceptarlo sin vergüenza.
Mi relación con Joseph es de una amistad que está volviendo a florecer. Me atrae demasiado y a veces me siento culpable al rechazar sus invitaciones pero necesito poner distancia para tener mi cabeza clara y no caer en viejos patrones. Cenamos juntos dos veces mas y siempre hablamos de su nuevo proyecto pero hasta ahora no deje que me besara. Susan está orgullosa de mí.
Viernes en la noche y llego a casa rendida. Ni si quiera tengo ganas de cocinar. Me doy un baño, como un yogurt y un bocadillo calentado en microondas y me voy a la cama.
Sábado por la mañana comienza tranquilo. Hago algunas compras para darle carácter a mi departamento y lleno mi alacena y heladera porque dan pena. En terapia me enseñaron que comer sano es quererme a mi misma y lo tomo como un mantra.
En la tarde miro algunas películas cuando recibo el llamado de Susy
_ nena esta noche estamos invitadas a la inauguración de Palace Rock y tenemos pases Vip_ me rio ante su entusiasmo
_ Bien a qué hora_
_ A las nueve perra paso por ti ocho y media y mejor que te vistas sexy si te veo con otro de esos vestiditos de ejecutiva quemare tu guardarropa_
_ bien elegiré algo sexy tranquila con el fuego_ me rio y la dejo para ir a ver qué demonios me pondré.
Elijo un vestido azul de escote recto sin mangas y falda con detalles. Unos tacones color perla completan el conjunto, me peino y me maquillo. Cuando estoy terminando de perfumarme suena el timbre. Susan tiene llaves pero siempre toca por delicadeza. Como si fuera a encontrarme con alguien... milagros suceden.
Abro y ella lleva un pantalón ajustado negro y un top violeta con cuello alter
_ Estas hermosa nena_ le digo dándole un beso y saliendo
_ Te vez bien perra. Camina. Esta noche debemos conseguir sexo_ me dice con tono dramático y me rio. Aunque ella habla en serio. Yo no me imagino volver a casa con un desconocido.
Llegamos al bar y ella se acerca el enorme gorila de la puerta da nuestros nombres y entramos sin hacer fila. Nos entregan los pases vip.
Entramos y ya hay bastante gente. El vip está arriba sobre las escaleras y da vista al escenario.
En el vip hay dos barras muy luminosas atendidas por guapos barmans. Susy me toma de la mano y me lleva a un grupo de chicos y chicas en una mesa grande
_ hola gente ella es mi amiga Megan ya les hable de ella_ todos se levantan a saludarme con entusiasmo y simpatía. Nos sentamos y Susan nos hace traer margaritas. Los tragos son gratis en el vip así que no me preocupo por el dinero.
Con los chicos charlamos bastante son todos amigos de Susan del trabajo. Cerca de la once nos ponemos a bailar. Voy por mi tercera margarita y me siento algo ebria pero estoy bien. Bailamos entre todos y me divierto como pocas veces me paso. Luego vamos a los servicios. Al salir comemos algo y volvemos a bailar. Estoy pasándola muy bien cuando siento unas manos sensuales pasear por mi cintura, me doy vuelta algo alterada y me encuentro con la mirada ardiente de Joseph. Comenzamos a bailar sensualmente, el me acaricia los brazos y la cintura. El siempre bailo bien pero yo me sentía un poco torpe. Después de varias salidas con los chicos en Londres comencé a soltarme y ahora me siento muy sensual y atrevida. Me doy vuelta y restriego mi trasero contra su erección.
Nos movemos al ritmo de la música hipnotizanté. Sus brazos me pegan a su cuerpo y parece que estuviéramos teniendo sexo. Un momento después el calor me mata
_ necesito tomar algo_ digo en su oído y él me toma la mano para llevarme a la barra_
_ Dos margaritas mas limón que tequila_ decimos al unisonó. Ese fue el trago que nos unió la noche que nos conocimos. Nos reímos porque nos pasa por segunda vez desde que nos encontramos.
_ ¿estás con Susan?_ me pregunta dándole un trago a su vaso
_ Y con sus compañeros de trabajo ¿tu?_ digo dándole otro trago esperando que no esté aquí con Marianne
_ vine con Donovan, es amigo del dueño pero me abandono por una rubia. Estaba pensando en irme cuanto te vi_ dice y me guiña el ojo. Estoy a punto de decirle algo cuando mi celular vibra
"perra te dije esta noche consigo sexo así que tu jojo te lleve a casa y de paso quita las telarañas de tu " joja"" me rio ante lo absurdo del mensaje y Jo me mira extrañado
_ Susan encontró compañía así que me quede sin vuelta a casa_
_ No hay problema no vine en auto porque sabía que iba a beber, pero te llevo en taxi _
_ gracias_ dijo y bebo lo que queda de mi margarita.
Salimos de la disco y encontramos un taxi. Vamos hablando de cómo está montando su nueva empresa. De los inversores interesados y de cómo su padre está comenzando a tener problemas con las deudas. Llegamos a casa y el taxi para lo miro y me muero el labio. Las margaritas me dan valor y pregunto
_ ¿quieres subir por un café?_ el me mira y sonríe de costado
_ tengo una reunión mañana en la mañana con un inversor que se va a Miami el lunes, si no subiría no lo dudes_ dice
_ Bien, que tengas suerte mañana_ le digo y le doy un beso en la mejilla tratando de disimular mi decepción. Antes de bajar suena su celular. Miro la pantalla cuando lo saca y veo que es Marianne. Suspiro decepcionada. Bajo sin decirle nada cuando veo que el guarda el teléfono sin contestar. Dijo que terminaron pero nadie te llama a las dos de la mañana si terminaste a menos que sea una llamada desesperada.
El taxi se va y entro al departamento sintiendo un nudo en el estomago y pienso en llamarlo para preguntarle porque ella lo está llamando a esta hora pero me contengo. No me importa, Joseph es solo un amigo y no puedo pensar en tener celos de él aunque este con esa perra.
Me quito la ropa y no tengo ánimos de ducharme. Lo hare mañana. Me quito el maquillaje y poniéndome un camisón me acuesto.
Mi celular vibra y veo un menaje de Joseph
" maldigo a este viejo que me cita mañana en la mañana pero la tarde la tengo completamente libre y me gustaría mucho llevarte a un lugar especial ¿ quieres?¿ puedes? Me pregunta y sonrió y la angustia se va diluyendo
"quiero y puedo" le contesto
"al mediodía te llamo para almorzar y luego salimos, descansa hermosa"
"descansa Jo..." y le envío un beso de emoticón.