A escondidas ~Daniel Oviedo~ {Acabada}

Capítulo 1

6 de junio de 2016 (Sevilla) 20:19

- Llámame ¿si?

- Que si Helena, no seas cansina

- Solo te pido que tengas cuidado, Candy, ya sabes lo cruel que puede llegar a ser Iván.

- Tranquila, ya sé llevarlo, solo déjame

- Soy tu hermana mayor, me preocupo por ti

- Está bien, nos vemos mañana

- Te recojo a las 7:20

Asiento y le doy un corto abrazo a mi hermana antes de dejarla ir por el ascensor. (Helena en multimedia)

Introduzco con cuidado la llave metálica en la cerradura, la giro hacia un lado y, antes de entrar a la casa cojo mis altos tacones negros entre las manos y cierro con cuidado sin hacer el más mínimo ruido. Subo hacia mi cuarto y me siento en la cama, encojo mis rodillas en mi cuerpo y las abrazo sollozando mínimamente en éstas.

- Eh, tu, nena ¿donde has estado?

- Y...Yo, he... estado con mi...mi hermana

- Ya... bueno, tampoco es que me importe, hazme la cena

Agarra mi camisa entre su mano y hace fuerza al acorralarme en la pared.

- Quiero pollo, y patatas, ya puedes ir empezando puta.

Asiento con miedo y me zafo de su agarre. Me dirijo a la cocina y comienzo a cocinar, una vez he terminado la cena de "mi marido" la dejo en una bandeja y se la llevo al comedor, enciendo la tele y pongo el fútbol, le sirvo la bebida y vuelvo a la cocina.

- ¡Iván, ya está la cena!- grito. Noto sus pasos yendo hacia el comedor y en cuestión de segundos lo único que se oye en el pequeño departamento es la televisión. Abro la nevera y cojo un yogur, para no arriesgarme a quitarle a Iván su comida. Ando hasta mi cuarto y me lo como terminando los deberes del instituto.

(...)

- Candy, joder despierta- oigo la voz de Iván junto con unos golpes secos en la espalda.

- ¿Qué pasa?- me froto los ojos y me doy cuenta de que me había quedado durmiendo sentada e la cama.

- No tengo sueño.

- ¿Y qué hago Iván?

- Joder, a veces eres gilipollas nena.

- Iv...

- Llevo tiempo sin hacerlo con nadie y tú eres mía de modo que...

- No, Iván por favor, no lo hagas.

- Sabes que me da igual lo que me digas, nena.

(...)

6 de junio de 2016 (En otra parte de Sevilla) 22:15

- Dani, vamos, cuéntamelo

- No, Blanca, sabes que es mi vida privada.

- Hermanito, solo quiero ayudarte- coge mis manos y entrelaza nuestros dedos- eres mi único hermano y veo que lo estás pasando mal.

- No sé

- Por favoor- pone un puchero y sonrío débilmente 

- Está bien- cedo y Blanca me abraza con fuerza.

- Bien, ¿qué te hacen esos capullos? que los reviento

- Tranquila hermanita, no hace falta que mates a nadie, solo me pegan, me insultan y me obligan a hacer cosas, no es nada muy exagerado.

- ¿Que hacen qué?- me mira anonadada y enseguida se lanza a mis brazos y logro percibir unos sollozos provenientes de ella, hunde  su cabeza en mi pecho y me estrecha más entre sus brazos.

- Vamos pequeña, no es nada.

- Dani, eres mi hermano, y te quiero muchísimo, pero eres un completo idiota, no puedes dejar que gente como Álvaro, Axel y Marco te humillen de esa manera.

- En cierto modo prefiero que me lo hagan a mi a que se lo hagan a cualquiera.

- Tu verás, pero como cualquiera de ellos te ponga un solo dedo encima les meto una hostia que les dejo de calcamonía en la pared.

- Que sí- río ante su comentario y le doy un pequeño beso en la mejilla.

- Por cierto, Dana, mañana he quedado con Candy y Helena para ir al instituto, ¿te vienes?

- ¿Candy?

- Es María, ¿te acuerdas de ella?

- Claro, pero... ¿por qué le llamas Candy?

- Larga historia Dana

- Tengo tiempo.

- Pero yo no, voy a cenar, no ocupes toda la cama que luego yo no quepo.

- Blanca- pronuncio antes de que salga por la puerta.

- Dime

- Te quiero

- Y yo hermanito, descansa.

Y esta noche espero poder dormir bien, es la razón por la que duermo con mi hermana melliza, tengo pesadillas cada noche y con los años van a peor, solo necesito encontrara a alguien...