-Bueno, pues creo que tendremos mucho tiempo, para que me cuentes la historia del porque, tienes tan mal concepto de mi, no crees?.
Eso era lo que menos quería, seguirme de largo la cena con el, porque, muy dentro de mi, sabia que no tenía nada que le interesara a el o digámoslo así, era muy normal, en todos los sentidos, para el.
-Si, claro.- le dije cortante, mientras que en ese mismo instante un texto me llegaba al celular, era de..., de mi mejor amigo George, eso me devolvió un poco el animo y una gran sonrisa.
George:
Hey nena como te fue en la entrevista?, sabes que por el trabajo no la pude ver pero, para mi creo que fuiste la mejor, entonces hay que ir a celebrar eso, que dices?? ☺️.
Alex:
Digo que para ti siempre será un si ❤️.
Y así eran nuestros mensajes de siempre, aunque no éramos, ni nunca fuimos nada, esos mensajes y todo el eran los que siempre me sacaban una sonrisa y estaban siempre conmigo.
-Y que tal el trabajo Alex?.- preguntó.
-Pues ha ido todo muy bien.- dije tímida.- siempre fue lo que quise realmente, así que es perfecto.
-En realidad te gusta.- dijo afirmando con impresión.
-Si, acaso a ti no?.- si, ya, era todo una curiosa.
-Sabes, no es que no me encante lo que hago, porque lo hace, de hecho diría que tiene muchos beneficios ser quien soy, muchos.- recalcó y sonrío coquetamente.- pero, también tiene demasiados contras y es algo que no puedo impedir.
Termino y me miro expectante a mi reacción a sus palabras y pues yo... yo nunca había oído hablar así a Eliot, era incluso un milagro que estuviéramos los dos metido en un mismo espacio hablando de esta manera y sin matarnos el uno al otro.
-Dices entonces que... sacrificas muchas cosas por tu trabajo?.- pregunte titubeante.
-Al parecer, si.- dijo pensativo y yo realmente no sabia como seguir con nuestra charla, hasta que entrar al parking del restaurante me salvo.
-Llegamos.- anunció, salió del coche y yo volví a respirar, el chico del parking dispuesto a abrir mi puerta fue ahuyentado de repente por Eliot.
-Hey chico, ya lo hago yo, toma.- le tendió las llaves y...-ah, no lo rayes.- el chico solo lo miro asustado.
-Señorita.- dijo tendiéndome su mano y así confirmaba que Eliot era todo un seductor e idiota.
-Gracias.- dije tímida, pues esto era algo realmente raro, desde su invitación, la forma en la que estaba comportándose conmigo, hasta la charla que habíamos tenido en el auto, que aunque había sido muy corta había sigo por lo menos un avance, aún así tome su mano, la cual no soltó.
-Creo que no deberíamos tomarnos de la mano en publico Eliot.- dije como una sugerencia, pero me ignoro y su cara ahora era totalmente inflexible y dura.
-Oye podrías devolverme mi mano, porfavor.- le volví a decir eso, retorciendo mi mano, bajo la suya, pero la suya en comparación a la mía era enorme, por lo que no salió de su agarre.
-No.- que le sucedía?!.
Entonces la soltó hasta que llegamos a la entrada de, "Je veux" uno de los restaurantes más exclusivos de aquí y... pero que tenía Eliot en la cabeza?!, tan solo una botella de agua, aquí valía prácticamente un ojo de la cara, no podía creer que siendo yo, me haya traído aquí, pensé que quizá terminaríamos en un puesto de hotdogs, pero no aquí, era otra cosa rara de el, pero siendo sincera el restaurante era magnifico.Hola chic@s se que no esta tan interesante este último capítulo, pero tranquios que mejórare. ✋🏼🌚❤️.
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Siempre que te tenga
RomanceEliot Werstein es un hombre de unos 28 años, famoso, rico y guapo actor de la industria del cine, acostumbrado tener a miles de fans y obviamente a muchas mujeres cayendo a sus pies, nunca imaginó que una única persona no lo hiciera, o que hiciera d...