Capitulo 2 - Eliza Army
1o años después
New York tenía una vista increíble desde la oficina de Kattia, o Eliza como le gustaba que le llamaran.
Army's Corporation era un gran recinto comercial en Estados Unidos. La dueña siempre era subestimada por todos sus nuevos socios, a quien dejaba sin habla en cuanto entraban por la gran puerta de madera caoba.
Eliza miro hacia el teléfono en el escritorio, que en ese momento estaba sonando. Con su precioso dedo delgado apretó un pequeño botón, dándole soso a la voz de la nueva ayudante de recepción.
- Señorita Army, la señorita Harper Cox esta aquí, ¿La dejo pasar? - Eliza rodó sus ojos cafés y colgó inmediatamente.
En la recepción, la pequeña e inocente Penélope, la nueva ayudante de recepcionista, se encontraba totalmente desconcertada, ¿Acaso había dicho algo malo?. La recepcionista llego desde la bodega y la miro entrañada.
- ¿Que sucede? - pregunto alzando su ceja completamente depilada.
- Me ha colgado - la recepcionista le pregunto que le había dicho - Le quería avisar de la llegada de la señorita Cox. - dijo, mirando a la mujer que se encontraba sentada en la sala de espera viendo su costosa manicura.
- ¿Que tontería has hecho? - la recepcionista reprimió las ganas de soltarle un zape. - Nunca se avisa de la llegada de la señorita Harper, solo se le deja entrar. Penélope abrió sus ojos como platos. - Tienes suerte de seguir aquí - dijo. Se acercó hasta Harper, quien estaba un poco molesta por el trato que le habían dado. - Siento lo ocurrido, señorita Cox - Harper se levanto, evitando ser grosera.
- Solo ten mas precaución...- trataba de decir su nombre, pero al no recordarlo se marcho.
Al abrir la oleada puerta, Harper divisó a Kattia, quien veía un lluvioso new York, con una taza de café en sus manos.
- Creí que la pobre chica le daría un infarto en cuanto colgaste. - Eliza levanto un poco su labio.
- Sabes que me encanta que las cosas funcionen como me gusta, ella se tiene que adaptar antes de siquiera pedir el empleo. Me libero de toda culpa.
- ¿Que haré contigo, Kattia? - dijo Herper, mientras se acercaba a abrazar a Eliza.
Todo el mundo veía a Elizabeth Army como un pequeño diamante que si lo querías adorar te quemaría. Una mujer exitosa, y asquerosamente rica para solo contar con 26 años de edad. La única persona que conocía la verdadera esencia de Eliza, era Harper, para ella, la exitosa mujer, seguía siendo, Kattia Army, aquella chica que siempre defendía a todos sus compañeros. Aquella que cuando hacían un trabajo en equipo, a pesar de que ella lo hiciera todo sola, siempre les daba una excelente calificación a sus compañeros, quien se reía de todo, y que no tenía miedo de nada, a la que nada le intimidaba.
- Pero mujer...dime a que has venido - dijo Kattia, siempre yendo al grano.
- Te vengo a invitar a mi boda - dijo Harper.
- Y dime, quien es la víctima - dio un sorbo a su café, y Harper espero que el liquido quemara su boca de víbora.
- Pequeña venenosa...es Jules Salvatore - Kattia frunció su ceño al no localizarlo entre sus amistades.
- No lo conozco...¿Extranjero? - Harper asintió.
- Italiano, lo conocí en la panadería - Sonaba gracioso, pero Harper tenía una panadería en Italia... Su suelo siempre fue vender pan y su panadería era muy famosa, ya que solo asistían personas de la élite de Volterra.
- ¿Quieres que avise a Jared? - Jared era un buen amigo de Kattia, su abogado personal...que se había encargado de los 3 divorcios anteriores de Harper.
- Creo que el es el indicado - dijo Harper.
- Creo que eso escuche con Botton...- aseguró.
- No compaginamos...el quería hijos y era comprensible es 10 años mayor que yo. Caliente el muy desgraciado...pero vamos Kattia. ¿Yo de mama? - Claro que Kattia la entendía.
Harper Cox, una de las chefs de categoría del mundo. No tiene un trabajo estable, ya que se aburría. Pero su correo electrónico como el de casa estaban llenos de solicitudes para chef, pero ella le gustaba lo aleatorio.
- ¿Y los otros dos? - pregunto, viendo las gotas de lluvia caer en su ventana. No- Uno fue en las Vegas, y por que había tomado mucho vodka...no me puedes culpar. El otro...bueno, era una joya en la cama, pero no me convencía como pareja...necesito alguien que me llene.
- Pero si me dices que era bueno en la cama...¿Por qué no te llenaba? - dijo alzando sus cejas.
- Quiero mas en una persona....no solo quiero que me llenen el oyó - dijo, entrecerrando los ojos.
- Pero lo disfrutarías - dijo.
- Bien...tengo un vuelo que sale dentro de 2 horas, me tengo que ir. Es insoportable tener que esperar todo ese tiempo en el aeropuerto. - dijo rodando sus ojos.
- No se cuantas veces tengo que repetirte que uses mi jet privado - dijo, rodando los ojos.
- Pero tu siempre estas tan ocupada, que no lo tienes siempre disponible - dijo.
Las dos se abrazaron.
- Te quiero, Kat - Kattia la abrazo mas fuerte.
- Gracias - Kattia no tendía a mostrar sus sentimientos, pero por alguna razón, siempre le recordaba a Harper lo importante que era para ella.
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Pieces of the heart (Trilogía Pieces #1)
Romance- ¿Por qué, Harper? - pregunto Kattia. - La mayoría de las personas tienden a traicionarte - Harper acariciaba su cabello como a un gatito indefenso. Kattia se veía tan destruida, nunca antes había estado así. Sin exagerar, Harper creía que nunca...