Mi Vecino Es Un Vampiro

Epilogo

Me arrodille frente a unas cajas y comencé a desempaquetar lo que había.

-¡Tu hermano quiere hacer su fiesta de 15!- Anuncio preocupada mi madre.

-¡Le dije que eso solo lo hacen las mujeres, pero sigue insistiendo!

-Deja que haga lo que quiera.- Dije sonriéndole.

Ella puso sus ojos en blanco.

-Lo que quiera menos eso.- Zayn entro a la sala con más cajas que acababa de bajar del camión de mudanzas.

-¿Van a estar bien?

Pregunto Abel entrando detrás de el.

-¡Por supuesto! La universidad de Elena queda mucho mas cerca desde aquí. Tendrá que viajar menos, aunque solo le quedan unos meses para graduarse de ella. Además mi trabajo también esta cerca.

Zayn se puso a mi lado y me abrazo por los hombros.

-Estaremos bien.- Me limite a responder.

Estaba nerviosa, y en parte ansiosa. Estaba mudándome con Zayn a un apartamento en el centro, donde los días no eran tan fríos como en mi antiguo barrio. Al principio la idea no le agrado mucho a mi madre, quien había estado muy sobre protectora, pero al fin de cuentas, yo ya era mayor de edad y decidía por mi misma.

-Le estaba comentando a Elena que David quiere hacer fiesta de 15.

-¡¿Qué?! ¿Eso no es para mujeres?

-Exacto, ese es el problema.

-Puede hacer lo que quiera.- Acoto Abel. -Pero que sea luego de la boda, porque si no será un lió.

Zayn sonrió instantáneamente y deslizo su mano hacia la mía, tocando mi anillo de compromiso.

-¿Ya se enviaron las invitaciones, verdad? ¡Sigo insistiendo en que debían haberse mudado luego de casarse! ¡Ahora es todo un problema, los arreglos de la boda más esto...!

-Mamá cállate.- Ordene.

-Como sea, al menos no tienen hijos.- Rió mi madre.

-¡ESO SI QUE SERIA UN LIO! ¡Si no mírenme a mi aquí!

Rió aun más fuerte junto con Abel.

Zayn me miro y sonrió.
El llevo su mano a mi vientre y miró a nuestras respectivas madres.

-Hablando de eso, hay algo que debemos decirles...

A mi madre casi le da un infarto cuando Zayn pronunció esas palabras y yo instintivamente le pegué en el estomago.

-Ya, solo era una broma, pero quiero tener muchos hijos con Elena.

Se Defendió él, sobandose el estomago.

-¡Zayn! - Regaño su madre.

Después de que nuestras madres salieran de nuestro apartamento, me comencé a poner mas nerviosa de lo que ya me encontraba. Había estado junto a Zayn siendo su novia estos años, pero mudarme con el era algo muy diferente. Zayn era muy romantico y me respetaba muchisimo, pero como todos tenía defectos. Aunque lo amaba, detestaba su narcisismo y su sarcasmo.

Después de un rato decidí salir a ver que hacía, mi prometido. No me extraño encontrarlo frente al espejo, peinando su perfecto cabello hacia arriba.

-¿Que haces? - Pregunté. Necesitaba calmar mi ansiedad y romper el silencio que había entre nosotros, considerando que esta noche dormiriamos juntos.

-¿Que crees que hago Elena?, acaso no ves que estoy jugando beisbol.

Respondió el un poco hostil, el sarcasmo goteaba en cada una de sus palabras.

En cuanto dijo esto me retire de su lado. Necesitaba calmarme y pensar. Tenía unas ideas en la cabeza que no me ayudaban mucho. Estaba estresada y preocupada. Me preocupaba que no había tenido alguna señal de los cazadores durante estos años. Temía que mi padre o quien estuviera al mando, planeara algo contra Zayn. Claro yo no permitiría que nada le pasara e incluso estaría dispuesta a dar mi vida a cambio de la de él, pero la idea de perderlo, me mataba día a día.

-Lo siento-.Dijo en cuanto entre por la puerta y me abrazo.

Delicadamente tomo mi cara en sus manos y me besó.